Palma de Mallorca es desde este fin de semana y hasta el próximo día 25, escenario de la XXVI Reunión Ordinaria de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) en la que, una vez más, se debatirá el futuro del atún rojo.
Lo ideal para el sector sería que de las 1.300 toneladas actuales se pasase a 1.580
A lo largo de este lunes, empezará a conocerse el reparto de las cuotas de pesca entre los diferentes países y, aunque no se esperan grandes sorpresas, ya que el reparto para 2019 y 2020 se concretó con un total de 4.000 toneladas que llevan a alcanzar las 36.000 hasta final del año que viene, los almadraberos no pierden la esperanza ante un posible incremento durante la negociación.
Luciano Muriel, el presidente del comité de empresa de la almadraba tarifeña, ha insistido en que lo ideal para el sector sería que de las 1.300 toneladas actuales se pasase a 1.580.
Muriel afirma, además, que la conclusión del plan de recuperación del atún rojo puesto en marcha en 2008 debería llevar a una ampliación de la cuota que permitiese incluso a la flota voracera afectada por el alga asiática poder beneficiarse de la pesca de esta especie.
El presidente del comité de empresa de la almadraba de Tarifa no entiende por qué a la flota Canaria se le ha incrementado la cuota en los últimos tres años hasta en un 1000 % y, sin embargo, a las almadrabas de Cádiz la subida es mínima.
La almadraba de tarifa cuenta en la actualidad con 60 trabajadores que en la temporada alta crece en número notablemente debido a los puestos indirectos que se crean en el sector.
