Desde que en la madrugada del jueves 20 al viernes 21 de abril se tuviera constancia de la situación del buque, desde la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras no se han escatimado esfuerzos para dar solución al Panagia Parou, que terminó yéndose a pique en el muelle de Isla Verde, donde llevaba amarrado desde finales de 2012.
Primeramente se pusieron todos los medios, humanos y materiales, necesarios para que el hundimiento provocara el menor problema posible a la operatividad del propio puerto, de los demás buques que navegan por esa zona y, por encima de todo, evitar cualquier vertido que contaminase las aguas. Afortunadamente, y gracias a la rápida actuación, todo está controlado desde primera hora sin contratiempos dignos de mención.
Desde entonces se mantiene un dispositivo que vela por la seguridad del mismo durante las 24 horas del día y ahora todas las gestiones se centran en que el armador asuma la responsabilidad que le corresponde para su reflotamiento. Es la propia APBA quien se está encargando de buscar alternativas y hasta cuatro empresas podrían optar a esta actuación.
Nadie mejor que el propio capitán marítimo del puerto algecireño para explicar lo sucedido y lo que puede ocurrir a partir de ahora con el buque griego. Julio Berzosa hace un esfuerzo, tras ser recientemente operado de la vista – de ahí que porte gafas de sol y por lo que pide disculpas -, para ofrecernos todos los pormenores del hundimiento del Panagia Parou.
Los esfuerzos lo tendrían que haber hecho antes de que se hundiera
El conocimiento de que tenía una vía de agua y que se iba hundiendo poco a poco lo tienen desde enero o febrero
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