Los sindicatos (Coordinadora, UGT y CCOO) han decidido, en un gesto de buena voluntad, no ejercitar las dos primeras jornadas de huelga en los puertos españoles, a la espera de que el Gobierno tome las riendas de la negociación, convocando una Mesa de diálogo directa y potente, que definitivamente pueda provocar el fin del conflicto que mantiene el sector de la estiba, desde que se conoció la intención del Ministerio de Fomento de presentar un Real Decreto Ley para dar respuesta a la Sentencia de los Tribunales Europeos, sin el consenso de empresas y trabajadores.
La decisión se adopta, ante las graves consecuencias que para los puertos – principalmente, el de Algeciras – está teniendo el preaviso de huelga. Maersk Line ya advirtió el pasado miércoles, que los tráficos se han reducido en el primer puerto de España, en un 20 % por voluntad de los clientes, al haberse creado cierta inestabilidad a la hora de saber si los barcos van a ser o no bien atendidos, lo que ha provocado desconfianza.
Esa es una de las causas por las que los sindicatos, han adoptado esta postura de apertura a la negociación y como gesto de buena voluntad. Ahora, ante la falta de apoyos al Real Decreto del Gobierno, para que éste pueda superar el trámite parlamentario (C´s al igual que el PSOE, ya ha anunciado su negativa a convalidar el documento, algo que ya habían hecho, el resto de partidos de izquierda), los representantes de los estibadores esperan que el Ejecutivo retome la negociación asumiendo las riendas de la misma, para que se puedan alcanzar acuerdos concretos que sirvan como enmiendas al texto que supuestamente se va a rechazar en la Cámara Baja.
Todo queda ahora, a expensas de lo que haga el Gobierno, que tras este movimiento de los sindicatos y la petición expresa de las empresas para que abandere la negociación, tiene la pelota en su tejado, para buscar una salida al conflicto que termine con el consenso de todas las partes y evite que siga planeando, por los puertos españoles, la sombra de una huelga que ya ha dejado daños en el sector que pueden llegar a ser irreparables.