El esfuerzo de la naviera UECC por modernizar su flota con buques de bajas emisiones de carbono sigue su curso con la botadura, en Shanghái, el pasado 16 de agosto, del segundo de una serie de tres nuevos buques de propulsión de híbrida de baterías y gas natural licuado.
El último buque de transporte de automóviles y camiones fue botado un año después de comenzar su construcción. Un año en el que, tanto el astillero como el armador, han superado los problemas logísticos y de mano de obra ocasionados por la pandemia del Covid-19, logrando mantener el calendario de entregas.
Está previsto que este buque se entregue definitivamente junto con el tercer barco en el primer semestre de 2022, mientras que la primera unidad botada a principios de este año se entregará a fines de este otoño tras su puesta en servicio definitiva.
UECC ha sido pionera en la adaptación de la tecnología híbrida para el segmento del transporte marítimo de automóviles en busca de menores emisiones de CO2, basándose en un par de buques portacoches pioneros por el uso de doble combustible con gas natural licuado que ya han estado en operación comercial durante los últimos cuatro años.
Desafíos técnicos
El generador de eje permite al buque recargar sus baterías mientras está en el mar, de modo que puede hacer funcionar la hélice de proa al entrar y salir del puerto únicamente con la energía de la batería, lo que contribuye a reducir las emisiones de acuerdo con los requisitos de las Autoridades Portuarias, y en la línea de la estrategia de reducción de la huella de carbono marcada por el Puerto de Vigo y de conseguir una Terminal verde con cero emisiones.
La energía de las baterías en los nuevos buques mejorará la eficiencia operativa y reducirá aún más las emisiones. En este sentido, el uso de una solución híbrida con baterías permitirá a UECC superar el objetivo de la OMI de reducir la intensidad de carbono en un 40% respecto a los niveles de 2008 en 2030.
Así, se estima que las emisiones de dióxido de carbono se reduzcan en un 25%, las de SOx y partículas en un 90% y las de NOx en un 85% gracias al uso del gas natural licuado, mientras que los nuevos buques también cumplirán las limitaciones de emisiones de NOx de nivel 3 de la OMI para el Mar del Norte y el Mar Báltico.
Problemas de pandemia
El programa de nuevas construcciones sigue cumpliendo el calendario previsto, a pesar de los importantes obstáculos logísticos debidos al cierre y a las restricciones de viaje, que han dificultado la adquisición de equipos de proveedores mundiales y han afectado a la capacidad de mano de obra para la construcción, que requieren cientos de trabajadores.
Una vez entregados el trío de buques nuevos, UECC contará con cinco barcos portacoches ecológicos de su flota de 17 buques, ya que su enfoque en las operaciones sostenibles está destinado a dar a la compañía líder de transporte marítimo de corta distancia una ventaja comercial en un futuro de transporte ecológico.
Estas mejoras energéticas de los buques están alineadas con los objetivos del Green Bay y el Plan Blue Growth de la Autoridad Portuaria de Vigo, que buscan reducir la huella de carbono mediante diferentes proyectos para mejorar la eficiencia energética y fomentar el uso de renovables.
En esta misma línean la naviera lleva trabajando intensamente con el Puerto de Vigo durante todo el año para garantizar el suministro de gas natural licuado a sus buques, y en paralelo, para que estos se puedan conectar a la red eléctrica, tanto para la recarga de baterías, como para el consumo de electricidad durante el atraque, lo que se conoce como “cold ironing”. Con ello, se garantiza que los buques generarán cero emisiones en el Puerto, ya que la energía que suministra el Puerto viene totalmente de fuentes renovables, dando cumplimiento al Pacto Europeo Verde (European Green Deal).
El Puerto de Vigo estima reducir en un 25% las emisiones de su Terminal de coches con la entrada en funcionamiento de los nuevos buques.