El final del estado de alarma en España viene cargado de dudas, especulaciones, pero también de esperanzas de ir recuperando paulatinamente la normalidad que tanto se añora tras 14 meses desde que se declarara el inicio de la crisis mundial del coronavirus.
El Gobierno central estableció una nueva situación jurídica el pasado 25 de octubre, para dar cobertura legal a las comunidades y que éstas aplicasen todas las medidas y restricciones necesarias para contener el avance de la Covid 19, siendo la tercera declaración en este periodo de pandemia.
Entre las restricciones que más ha afectado a la ciudadanía se encuentra el toque de queda, que prohibía la actividad de madrugada, y el cierre perimetral entre territorios, que ha imposibilitado la libre circulación de personas, lo que ha perjudicado seriamente a las empresas dedicadas al transporte, no tanto de mercancías, ya que esta actividad se ha considerado esencial en todo momento.
En lo que se refiere al tránsito de personas en el Estrecho de Gibraltar, la situación se va a mantener igual en el enlace entre España y Marruecos, ya que este país mantiene sus fronteras cerradas desde mediados de marzo de 2020, pero sí que habrá libertad para viajar en barco entre ciudades españolas, como es el caso del enlace Algeciras – Ceuta, que ha visto caer sus números por encima del 65%.
Para hacerlo durante esta última etapa, los viajeros necesitaban acreditar ante la Policía Nacional o Guardia Civil el motivo del desplazamiento para poder llevarlo a cabo, algo que ya deja de ser necesario ante este nuevo escenario. A ello se une la apertura de las provincias, por lo que este enlace, al igual que los que une a otras ciudades del panorama nacional, se espera que recupere buena parte de su actividad para respiro de compañías y empresas del sector.
