Este martes, 15 de junio debía iniciarse oficialmente, la Operación Paso del Estrecho (OPE), pero el cierre de fronteras que Marruecos mantiene con España, impedirá por segundo año consecutivo el desplazamiento de miles de viajeros desde los puertos españoles.
La suspensión de la OPE va a causar graves perjuicios económicos a los puertos implicados (Almería, Málaga, Motril, Alicante, Algeciras y Tarifa). Así la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA) va a dejar de ingresar en su cuenta de resultados 11 millones de euros que, en el cómputo general del año, alcanza los 23 millones de euros, según ha señalado el presidente de la institución, Gerardo Landaluce quien añade que “el total de puertos implicados y las empresas participantes en este operativo van a tener pérdidas por más de 500 millones de euros a lo que se suma la notable reducción de las contrataciones temporales”.
Existe, por tanto, “preocupación por el tiempo desconocido que vivimos”, aunque Landaluce no pierde la esperanza de que se pueda recuperar la actividad, este verano, tras las graves pérdidas acumuladas. “No descartamos ningún escenario y estamos muy atentos a cómo se desarrollan los acontecimientos para que al margen de cómo se denomine, podamos dar respuesta a cualquier decisión de Marruecos, que pueda originar un importante flujo de viajeros tras casi año y medio de desconexión entre ambas orillas del Estrecho”, señala el presidente del puerto algecireño que concluye dejando entrever que la situación política entre España y Marruecos, no está ayudando. “Aunque se hable de la pandemia como discurso oficial para mantener cerradas las fronteras con España, las dificultades políticas actuales van en cascada y afectan a los ámbitos de la Administración que están habitualmente en relación estrecha para coordinar una operación como el Paso del Estrecho”, apostilla Landaluce.
EMBARQUES DESDE PORTIMAO
El claro ejemplo de esta situación es, la última orden del rey de Marruecos, Mohamed VI, que de la Dirección General de la Marina Mercante marroquí ha hecho pública, en referencia al aumento de la capacidad de la oferta en los puertos de embarque para facilitar la entrada de los marroquíes residentes en el extranjero, abriendo una línea marítima desde Portimao, en el Algarve portugués, para que los miles de compatriotas residentes en España puedan tener un enlace más directo, ampliando así los enlaces ya previstos desde el Sur de Francia e Italia, cuya capacidad de embarque inicial es de 20.000 pasajeros y 5.000 vehículos.
