El carguero de bandera liberiana y 230 metros de eslora por 38 de manga, AM Ghent, permanece fondeado en aguas de la Bahía de Algeciras, después de haber protagonizado, el pasado 12 de febrero, un vertido contaminante de fuel cuando realizaba una operación de abastecimiento en aguas del puerto de Gibraltar. El barco se encuentra a la espera de que se complete la tramitación del expediente abierto por la Capitanía Marítima del puerto de Algeciras, como consecuencia de la contaminación y así, ya se ha informado al capitán del buque que deberá dar cuentas a las autoridades españolas, una vez ha sido inspeccionado el buque.
El AM Ghent deberá permanecer en la zona, hasta que sea depositado el aval exigido por la Capitanía Marítima del puerto de Algeciras que asciende a más de 100.000 euros, con los que se deberá hacer frente a los gastos ocasionados por el vertido a la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras, a Salvamento Marítimo, que también acudió para participar en la limpieza de la contaminación y para responder ante una posible sancoión, una vez que se resuelva el expediente. El mercante también deberá corregir algunos incumplimientos detectados durante las inspecciones.
AVANZA EL EXPEDIENTE AL «CMA CGM LA TRAVIATA»
Tambièn avanza el expediente abierto al portacontadeores «CMA CGM La Traviata» por la intensa humareda desprendida de su chimenea, el pasado 18 de febrero, cuando partía del puerto de Algeciras, tras haber operado en la terminal de contenedores de TTIA, en dichas instalaciones.
Al parecer, el aval impuesto por la Capitanía Marítima del puerto de Algeciras se sitúa entre los 20.000 y los 30.000 euros, ya que la compañía reconoce la emisión de la nube de humo, pero no se ha podido confirmar que el hollín retirado de las aguas próximas al lugar en el que se produjo la emisión de gases por parte del buque de la naviera francesa, guardase relación con ese incidente.
Hay que recordar que el barco realizó una rápida operación de salida del puerto algecireño teniendo que cambiar brúscamente las revoluciones de sus motores, lo que supuestamente dió origen a una mala combustión, provocando la columna de humo que poudo divisarse desde varios kiómetros.
Se da la circunstancia de que la compañía CMA CGM opera con asiduidad en las instalaciones del puerto de Algeciras y en muy pocas ocasiones, se ha visto algunos de sus barcos involucrados en epidoios de contaminación, al tratarse, además, de buques modernos y eficientes. No obstante, deberán ser las autoridades marítimas las que concluyan sobre lo ocurrido el pasado 18 de febrero en la Ensenada de Geatres, poco antes de que el buque enfilase el Estrecho de Gibraltar con dirección al Canal de Suez.
