El astillero Armón ha entregado recientemente la patrullera Río Arlanza al Servicio Marítimo (Semar) de la Guardia Civil. El buque operará desde el puerto de Algeciras en misiones de lucha contra el narcotráfico e inmigración irregular en la zona del Estrecho de Gibraltar.
La Río Arlanza pasa a ser la mayor patrullera rápida de Semar con una eslora de 35 metros y una manga de casi ocho metros. Es la primera patrullera de la clase Guardamar para la Guardia Civil. La Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima (Sasemar) ya cuenta con cuatro embarcaciones de intervención rápida de esta clase, aunque con una eslora ligeramente inferior (32 metros).
La nueva embarcación fue botada a principios del pasado mes de octubre en el astillero de Armón en Burela (Lugo) y superó con éxito las pruebas de mar a lo largo del mes de noviembre.
El buque dispone de un innovador sistema de propulsión híbrido-eléctrico con hélices de paso fijo. En concreto, cuenta con dos motores de 1380 kw de potencia cada uno y otros dos grupos eléctricos de 300 kwe (kilovatios eléctricos). Puede alcanzar una velocidad máxima de 26 nudos y tiene una tripulación máxima de ocho personas.
Asimismo, tiene una autonomía 1.150 millas a 16 nudos y de 750 millas a 19 nudos y capacidad para 24.000 litros de diesel, 700 de agua dulce y 500 aguas negras.
El patrullero incorpora todos los implementos necesarios para llevar a cabo las operaciones asignadas y alojar a la tripulación, entre los que destacan, equipo de amarre y molinete de fondeo; equipamiento de cocina y acomodación; aire acondicionado; equipos contraincendios; grúa auxiliar de 3 txm o luces de navegación.
También cuenta con equipos de comunicación y navegación de última generación que permiten la conexión con helicópteros, equipos de salvamento y seguridad reglamentarios, gancho de remolque y cámaras de vigilancia. INFODEFENSA
