La alcaldesa de la localidad granadina de Motril, Flor Almón, y el presidente de la Autoridad Portuaria, Francisco Álvarez de la Chica, han reclamado la unión de todos los agentes económicos y sociales para exigir que la línea marítima que una la localidad con Melilla «siga funcionando como hasta ahora y la concesión de la ruta a FRS, tras una década haciéndola la Naviera Armas, no suponga una merma del servicio».
Ambos han cuestionado la decisión de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia y han afirmado que «es un nuevo agravio con Motril» tras la medida del anterior Gobierno del PP de dejar al puerto fuera de las subvenciones dedicadas a las líneas marítimas entre Melilla y la Península, «alrededor de 14 millones de euros». «Seguimos sin entender la resolución de la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) de retirar a la naviera Armas la conexión marítima con Melilla, además de la línea Huelva-Canarias, para así autorizar la compra de Transmediterránea. Es algo arbitrario e injusto», ha advertido el presidente de la Autoridad Portuaria.
La alcaldesa ha mantenido, por su parte, que «con decisiones de este tipo se cierne una amenaza de destrucción de empleo y se merma la competitividad» del puerto. Así, ha abogado por «hacer ver a la Comisión Nacional de Mercados y Competencia y al nuevo ministro de Fomento que esta línea con Melilla está asentada y funcionando muy bien».
Tras recordar que el desarrollo del puerto de Motril beneficia a toda la provincia, sostiene que no se puede permitir «que no se siga prestando el servicio con la calidad y regularidad que se ha hecho hasta ahora».
Ambos han hecho referencia al malestar de la ciudadanía con el nuevo barco que une Melilla con Motril, aceptado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y han exigido que «las condiciones de la línea se mantengan, así como los estándares de calidad y rapidez del barco».
Unos extremos que no se garantizan a su juicio con las características del Volcán de Tauce, ya que «se trata de un barco con capacidad tres veces menor que el Volcán Tinamar, posicionado en Barcelona, y de menor potencia, lo que incrementa el tiempo de travesía».
«Durante los cinco primeros días de la Operación Paso del Estrecho el número de pasajeros que viajan a Melilla ha descendido un 41 por ciento respecto al año pasado, lo que demuestra que la decisión de Competencia es perjudicial para Motril y los melillenses, además de haberse adoptado en el peor momento», ha revelado el presidente de la Autoridad Portuaria.
