Qué mejor sitio que la Plaza Alta para que Algeciras y su gente se eche a la calle para reivindicar algo que no considera justo. Más de 2.000 personas se han congregado este miércoles en el centro de la ciudad en apoyo al colectivo de estibadores, que se han visto respaldados en su lucha por evitar que el Gobierno lleve a efecto una reforma que puede mermar mucho, incluso acabar, con sus puestos de trabajo en el puerto algecireño.
Sindicato, agentes sociales, personalidades, hasta el equipo de fútbol de la ciudad, se han dado cita para dar su aliento a miles de familias que temen perder su estabilidad económica.
Los representantes políticos han vuelto a poner de manifiesto su solidaridad con los trabajadores, incluidos los del Partido Popular, dejando claro que por encima de todo está el sustento de 1.800 padres de familias, que esperan que en Madrid, allí sí, den un paso atrás para negociar las condiciones de la reforma que pide la Unión Europea.
