El sector pesquero europeo, representado por Europêche y con la participación de la Confederación Española de Pesca (CEPESCA), ha valorado positivamente el compromiso expresado por el nuevo comisario de Pesca y Océanos, Costas Kadis, de apoyar la actividad pesquera de la Unión Europea. Así lo han manifestado tras la reunión celebrada en Bruselas, donde se han abordado los principales retos del sector para la legislatura 2024-2029. Durante el encuentro, se ha debatido la necesidad de establecer políticas equilibradas que permitan el acceso a los caladeros tradicionales, refuercen la soberanía de los productos del mar de la UE y garanticen una competencia justa en el mercado, además de fomentar el crecimiento socioeconómico de las comunidades costeras.
Europêche ha destacado la visión a largo plazo del comisario Kadis, enfocada en un sector pesquero europeo más resiliente, competitivo y sostenible. Los representantes del sector han trasladado la urgencia de adoptar medidas inmediatas para frenar la reducción de la flota y la pérdida de empleo, una problemática derivada, según han señalado, de políticas desajustadas, el aumento de costes, las crecientes restricciones de acceso a zonas de pesca y la reducción del espacio marítimo disponible. También han insistido en la necesidad de aplicar estándares de sostenibilidad a los productos pesqueros importados similares a los exigidos a los pescadores europeos, con el objetivo de garantizar condiciones de competencia equitativas.
En cuanto a la Política Pesquera Común (PPC), Europêche ha reconocido los avances ambientales logrados, pero ha pedido un enfoque más equilibrado que tenga en cuenta, por igual, los objetivos medioambientales, socioeconómicos y de seguridad alimentaria. En este sentido, han propuesto la revisión de ciertas medidas consideradas ineficaces, como la obligación de desembarque, y la actualización de políticas para abordar retos como el cambio climático, el Brexit y la transición energética. Asimismo, se ha puesto de relieve la necesidad de reducir la carga administrativa y simplificar la normativa vigente, ya que la creciente complejidad regulatoria supone un obstáculo para la actividad diaria del sector.
Europêche ha pedido la revisión urgente del reglamento de 2019 que aprobó el plan plurianual de gestión pesquera del Mediterráneo Occidental
El acceso a los caladeros ha sido otro de los puntos tratados, con una petición expresa de garantizar el respeto a las zonas de pesca tradicionales. Ante las restricciones derivadas de la creación de áreas marinas protegidas y el desarrollo de proyectos de energías renovables marinas, el sector ha reclamado medidas que permitan compatibilizar la conservación del medio marino con la actividad pesquera. También han insistido en la importancia de adoptar un enfoque basado en la ciencia para la protección marina y la planificación espacial marítima, asegurando la viabilidad de la pesca en el largo plazo.
En lo que respecta a los planes de gestión plurianuales, Europêche ha defendido una mayor flexibilidad, con especial atención al Mediterráneo y al Báltico. En este sentido, ha pedido la revisión urgente del reglamento de 2019 que aprobó el plan plurianual de gestión pesquera del Mediterráneo Occidental. Esta solicitud se alinea con la demanda planteada esta misma semana por los gobiernos de España, Francia e Italia, con el apoyo de otros ocho Estados miembros de la UE y la mayoría de los grupos políticos del Parlamento Europeo. Además, la asociación ha instado a aplicar normas de control pesquero dentro de un marco temporal viable, respetando los principios establecidos en la legislación vigente y en colaboración estrecha con el sector.
Europêche también ha reafirmado su compromiso con la descarbonización total del sector, aunque ha subrayado la necesidad de que la UE garantice una financiación adecuada para afrontar este desafío. En este sentido, ha solicitado apoyo en el próximo programa de financiación y la puesta en marcha de un plan de renovación de la flota para facilitar la transición hacia una pesca de cero emisiones. Para ello, ha propuesto la inversión en nuevas fuentes de energía alternativas y en tecnologías que permitan una actividad más eficiente y sostenible.
Por otro lado, el sector ha manifestado su preocupación por la creciente dependencia de la UE de las importaciones de productos pesqueros, que actualmente representan más del 70% del consumo. En este contexto, ha instado a la Comisión Europea a aplicar cláusulas espejo que obliguen a los productos importados a cumplir los mismos estándares de sostenibilidad exigidos a los productos comunitarios. A su juicio, esta medida no solo garantizaría una competencia justa, sino que también respaldaría a los pescadores europeos y fortalecería la soberanía alimentaria de la UE.
En relación con las futuras negociaciones post-Brexit, Europêche ha solicitado directrices claras y acuerdos anticipados que proporcionen estabilidad y seguridad jurídica al sector. También ha insistido en la importancia de alcanzar un acuerdo pesquero antes de finales de 2025 para salvaguardar los intereses de la UE en aguas compartidas. Asimismo, ha defendido la vinculación del acceso al mercado europeo con el cumplimiento de las normativas pesqueras, proponiendo la adopción de medidas arancelarias y comerciales para contrarrestar prácticas insostenibles de terceros países, como Noruega.
Por último, en el marco del Pacto Europeo por los Océanos, Europêche ha subrayado la necesidad de situar la pesca en el centro de la estrategia marítima de la UE, destacando su papel clave en la soberanía alimentaria, el bienestar de las comunidades costeras y la gestión sostenible de los ecosistemas marinos.