La Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA) ha lanzado la licitación para la ampliación y remodelación del Puesto de Control Fronterizo (PCF) del puerto, con un presupuesto base de 8,6 millones de euros. Este proyecto tiene como objetivo la adaptación de las instalaciones existentes al incremento del tráfico de mercancías y a las nuevas normativas europeas que regulan los controles fronterizos.
El PCF actual está compuesto por dos edificios construidos en 2009 y 2013. A pesar de su relativa modernidad, el crecimiento sostenido de la actividad ha generado la necesidad de su ampliación. Entre 2019 y 2020, por ejemplo, se produjo un aumento del 30 % en el número de expedientes gestionados por Sanidad Vegetal, debido principalmente a los cambios introducidos por el Reglamento 2031/2016 de la Unión Europea sobre sanidad vegetal. En el caso de SOIVRE, el incremento fue del 15 % en el mismo período.
La actuación proyectada busca ampliar las capacidades del PCF mediante la construcción de un nuevo muelle de operaciones conectado a las instalaciones existentes. Este espacio incluirá áreas destinadas a la inspección de productos de origen animal y no animal, así como un módulo de oficinas que centralizará las actividades de los distintos organismos de inspección, como Sanidad Exterior, Sanidad Vegetal, SOIVRE y Sanidad Animal. Asimismo, se realizarán mejoras orientadas a la eficiencia energética y a la adecuación de las instalaciones a los estándares actuales de accesibilidad y seguridad.
El proyecto se desarrollará en dos fases principales. La primera fase consistirá en la redacción del proyecto de ejecución, que contará con un plazo de 2 meses para su elaboración inicial, más el tiempo necesario para revisiones técnicas y ajustes. La segunda fase incluirá la ejecución de las obras, con una duración estimada de 18 meses. Tras la finalización de las obras, se destinarán tres meses adicionales para la certificación final, sumando un plazo total de 21 meses para el contrato, aunque ciertos procesos, como las revisiones externas, no computarán en este período.
El presupuesto total de la licitación, que incluye partidas tanto para la redacción del proyecto como para las obras, se desglosa en diferentes conceptos. Entre los más destacados se encuentran las cimentaciones, que representan el 8,24 % del total; las instalaciones eléctricas y de iluminación, con un 12,8 %; y los cerramientos y divisiones, que suponen un 12,9 %. El uso de metodología BIM será obligatorio durante la fase de ejecución, para garantizar un control eficiente y detallado del desarrollo de las obras.
La adjudicación del contrato se llevará a cabo mediante procedimiento abierto, con una valoración que asigna un 50 % del peso a la oferta económica y el otro 50 % a aspectos técnicos, incluyendo calidad, sostenibilidad y programa de trabajo. Los licitadores deberán acreditar experiencia previa en proyectos similares, así como solvencia técnica y financiera. Además, será obligatorio comprometerse a adscribir personal cualificado para todas las fases del proyecto.