El Centro Portuario de Empleo de Valencia (CPEV) ha aprobado un protocolo de ciberseguridad con el objetivo de garantizar la continuidad de los servicios portuarios en caso de sufrir un ciberataque. Este protocolo, desarrollado en colaboración con la Comisión de Contratación del CPEV y aprobado por el Comité de Empresa, establece las medidas y procedimientos que deben implementarse para asegurar que las operativas portuarias puedan mantenerse en funcionamiento con la mínima afectación posible.
El principal objetivo del protocolo es asegurar que, ante un ataque a los sistemas informáticos del CPEV, se pueda proceder con una contratación de urgencia que permita la continuidad de las operaciones en el Puerto de Valencia y para sus clientes. La prestación de servicios portuarios se considera de carácter esencial para la sociedad, y cualquier interrupción podría comprometer tanto la libre circulación de personas y mercancías como la seguridad económica de la región. El protocolo busca minimizar este tipo de riesgos, dentro de las limitaciones que puedan surgir en una situación de emergencia.
En el documento, se detallan las medidas que se deben adoptar para proteger los sistemas informáticos, los datos sensibles y la información de la empresa frente a posibles ataques maliciosos provenientes de redes externas, como Internet. Además, se describe cómo los responsables de ejecutar el protocolo deben actuar para encontrar soluciones efectivas que permitan solventar cualquier conflicto derivado de una situación excepcional.
El CPEV considera que la ciberseguridad es una prioridad estratégica en el contexto digital actual, y la adopción de este protocolo se enmarca en su compromiso por mejorar la competitividad y la innovación. El uso seguro de nuevas tecnologías es clave para aprovechar las oportunidades que ofrece el entorno digital y al mismo tiempo proteger los servicios portuarios frente a amenazas en constante evolución.
El protocolo aprobado no solo garantiza la protección de los sistemas y datos, sino que también establece mecanismos para asegurar una adecuada asignación y divulgación de los procesos de contratación en situaciones de emergencia. Esto es esencial para evitar que los servicios se vean comprometidos por un ataque cibernético.
Finalmente, la implementación de este protocolo refleja la necesidad del CPEV de adaptarse a las crecientes amenazas de ciberataques, proteger los datos sensibles de la empresa, cumplir con las regulaciones en materia de seguridad digital y mantener la confianza de sus clientes. Todo ello con el fin de asegurar la continuidad operativa del negocio y del Puerto de Valencia, un enclave esencial para el comercio y la logística tanto a nivel nacional como internacional.