El Puerto de Motril ha definido un plan de obras con una inversión total de 105 millones de euros, con el objetivo de impulsar sus dos ejes estratégicos: el turístico-comercial y el industrial. Este ambicioso proyecto pretende consolidar el crecimiento del puerto en el corto, medio y largo plazo.
En el ámbito turístico, se ha proyectado la construcción de una terminal de cruceros tematizada, que aspira a convertirse en un referente en Europa. Esta infraestructura incluirá comercios, actividades recreativas y capacidad de atraque para tres barcos. Asimismo, se ha adjudicado la obra de una nueva zona náutica-deportiva y pesquera, que forma parte del Máster Plan-Motril, Puerto Abierto. La adaptación de la dársena interior también contemplará la mejora de las líneas marítimas regulares de pasajeros.
Según José García Fuentes, presidente de la Autoridad Portuaria de Motril, el proyecto busca concentrar toda la actividad turística y comercial en las zonas próximas a los barrios de Santa Adela y Varadero, dentro del marco de la relación puerto-ciudad. Las operaciones industriales y de mercancías se trasladarán al muelle de las Azucenas y a la Zona de Actividades Logísticas (ZAL). Estos proyectos representan 60 millones de euros del total de 105 millones destinados a las obras en curso.
Desarrollo de la ZAL y nuevas concesiones
El desarrollo de la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) también es un componente clave del plan de transformación del puerto. A las concesiones ya operativas en esta área, se sumarán otras actualmente en tramitación, que ocuparán 100.000 metros cuadrados adicionales y supondrán una inversión aproximada de 45 millones de euros. Además, se espera la generación de 110.000 metros cuadrados más, tras el relleno del muelle pesquero.
La culminación de estas obras permitirá prácticamente la ocupación total de la ZAL, lo que tendrá un impacto significativo en el desarrollo económico y social tanto de Motril como de la Costa Tropical. El puerto se posiciona como un nodo logístico esencial, con capacidad para atender la creciente demanda del hinterland.
García Fuentes ha subrayado la relevancia de este proceso de reconversión: «No solo estamos transformando el turismo de cruceros y las actividades náuticas, sino también las operaciones de mercancías. Con la llegada de nuevos concesionarios y operadores logísticos, se estimulará una mayor actividad económica, que generará más de 1.500 empleos estables».