Desde hace varias semanas, ATEIA-Aragón ha estado enfrentando una situación alarmante debido a la drástica reducción de los servicios ferroviarios con el puerto de Barcelona. Esta problemática no solo afecta a Aragón, sino también a otras terminales interiores conectadas con el puerto, como Pamplona, Logroño y Burgos.
Las obras en el Corredor Mediterráneo, especialmente en Roda de Bará, Cataluña, que comenzaron el 1 de octubre y se extenderán hasta marzo del próximo año, han generado importantes restricciones. Estas obras son una continuación del corte total de la línea con Barcelona que se sufrió del 26 de agosto al 12 de septiembre, y de las interrupciones que se vienen soportando desde finales del año pasado.
Durante los primeros ocho meses de 2024, se experimentaron retrasos y una reducción del 30% en los servicios ferroviarios, aunque se logró mantener cierta regularidad. Sin embargo, desde el 1 de octubre, la mala planificación en la asignación de surcos por parte de Adif ha provocado una caída del 70% en los trenes previstos. Aunque no hay nada oficial, se ha informado extraoficialmente que cerca del 40% de los surcos actualmente disponibles no se estaban utilizando. Esto sugiere que, además de la mala planificación de Adif, Renfe Mercancías no está utilizando todos los servicios confirmados, a diferencia de las empresas ferroviarias privadas que han logrado adaptarse mejor a las restricciones.
La situación es ya alarmante y puede volverse crítica si no se toman medidas inmediatas. En las terminales intermodales se acumulan contenedores a la espera de trenes que no llegan, y no hay suficientes camiones para manejar estos volúmenes. La necesidad de camiones para compensar la falta de servicios ferroviarios está afectando también a los exportadores e importadores del área de influencia de Barcelona, quienes encuentran dificultades para encontrar transporte.
Dos días atrás, uno de los principales actores en el movimiento ferroviario en Zaragoza, COSCO, informó que cancelaba todos los servicios ferroviarios entre Barcelona y Zaragoza hasta nuevo aviso, agravando aún más la situación.
ATEIA-Aragón ha hecho un llamamiento urgente a las autoridades para que se tomen medidas y se resuelva esta crisis, evitando así un colapso logístico que afecte gravemente a la economía regional y nacional.