La Delegación Territorial de Medio Ambiente en Huelva ha emitido una resolución, fechada el 4 de octubre de 2024, por la que se otorga a la Compañía Española de Petróleos, S.A. (Cepsa) la Modificación Sustancial de la Autorización Ambiental Integrada para la construcción de una planta de hidrógeno verde en sus instalaciones del Parque Energético La Rábida, ubicado en el polígono industrial Nuevo Puerto, dentro del término municipal de Palos de la Frontera.
Esta planta, de 400 megavatios (MW) de capacidad, forma parte del ambicioso proyecto del Valle Andaluz del Hidrógeno Verde que está promoviendo Cepsa. La compañía ha previsto una inversión total de 527,8 millones de euros para su construcción, con una proyección de generar 150 empleos directos y 500 indirectos durante su fase de desarrollo. Se espera que la planta entre en funcionamiento en 2026, según ha declarado Joaquín Rodríguez, director de hidrógeno de Cepsa.
La nueva planta de Huelva es la primera instalación del Valle Andaluz del Hidrógeno Verde que recibe la autorización ambiental necesaria para su puesta en marcha. El plan estratégico de Cepsa prevé la producción de 1 gigavatio (GW) de potencia de hidrógeno verde en el Parque Energético de La Rábida para el año 2028, adelantando en dos años la fecha inicialmente marcada en 2030. A este proyecto se sumará una planta similar en el complejo de San Roque, Cádiz, con lo que ambas instalaciones alcanzarán una producción anual conjunta de 300.000 toneladas de este combustible limpio. La inversión total entre ambos emplazamientos ascenderá a 3.000 millones de euros.
El Valle Andaluz del Hidrógeno Verde es una de las iniciativas más relevantes de la estrategia de descarbonización de Cepsa. Con la producción de 300.000 toneladas anuales de hidrógeno verde, la compañía busca transformar su modelo energético hacia fuentes más sostenibles y contribuir a la reducción de emisiones. Además, este hidrógeno se utilizará para fabricar productos derivados, como amoniaco y metanol verdes, lo que garantizará la disponibilidad de combustibles marinos sostenibles en los principales puertos de España. Este esfuerzo está alineado con la descarbonización de los sectores del transporte marítimo, aéreo y terrestre pesado, mediante la producción de biocombustibles avanzados.
La puesta en marcha de esta nueva planta en Huelva permitirá evitar la emisión de seis millones de toneladas de CO2 al año, además de mejorar la calidad del aire al reducir la emisión de otros gases contaminantes y partículas. Asimismo, el hidrógeno verde sustituirá al hidrógeno gris en los procesos industriales, lo que multiplicará su impacto positivo al ser empleado en la producción de combustibles renovables, en sustitución de los tradicionales combustibles fósiles.