El Puerto de Tarragona ha reforzado su posicionamiento como actor clave en el despliegue de la energía eólica marina, tras su participación en importantes congresos del sector y el reciente impulso normativo en España. La asistencia al Project Cargo Summit en Bilbao y al WindEnergy Congress en Hamburgo han sido parte de su estrategia para consolidarse como un puerto de referencia en este campo.
La energía eólica marina, especialmente la eólica flotante, se perfila como una pieza fundamental para alcanzar los objetivos climáticos de la Unión Europea, que espera que en 2030 la capacidad de instalación en el mar supere a la terrestre, cubriendo el 14% de la demanda eléctrica del continente.
Durante el Project Cargo Summit en Bilbao, celebrado del 17 al 18 de septiembre, el Puerto de Tarragona ha trabajado en establecer alianzas estratégicas con empresas del sector de la carga de proyecto, incluyendo aquellas vinculadas a la construcción y manipulación de componentes eólicos. Con más de 150 asistentes, este foro ha ofrecido un espacio para intercambiar ideas y explorar posibles colaboraciones en torno al desarrollo de infraestructuras portuarias relacionadas con la energía eólica marina.
Por otro lado, del 25 al 27 de septiembre, el puerto ha estado presente en el WindEnergy Congress de Hamburgo, el evento de referencia para la industria eólica, que ha congregado a más de 40.000 profesionales. Durante este congreso, representantes del Port de Tarragona, liderados por Pau Morales, han mantenido contactos con alrededor de 40 empresas del sector, entre las que destacan operadores de terminales, fabricantes de componentes, y consultoras. Estas reuniones han permitido dar a conocer las capacidades del puerto en la gestión de cargas de grandes dimensiones, así como su ambición de convertirse en una base operativa para el despliegue de la eólica flotante en el Mediterráneo.
En paralelo a estos esfuerzos comerciales, el Gobierno español ha dado un paso decisivo para el sector con la aprobación, el pasado 24 de septiembre, de la nueva regulación en energía eólica marina y renovables en el mar, lo que abre nuevas oportunidades para que Tarragona participe en el desarrollo de esta tecnología.
Para materializar este posicionamiento estratégico, el Puerto de Tarragona tiene previsto invertir en infraestructuras en los próximos dos años, destacando la ampliación del Muelle de Baleares en su segunda fase, que añadirá 19 hectáreas de superficie aptas para el montaje de aerogeneradores y plataformas flotantes. Asimismo, se contempla la posibilidad de construir componentes y ensamblar aerogeneradores en futuros muelles del puerto, en consonancia con los avances en los estudios de impacto ambiental y la planificación de nuevas infraestructuras.