El Puerto de Róterdam ha anunciado que las obras del proyecto Porthos de captura y almacenamiento de carbono (CCS) en su área portuaria avanzan a buen ritmo. Este proyecto, considerado de interés común por la Unión Europea, tiene como objetivo desarrollar la infraestructura necesaria para trasladar CO2 procedente de la industria en Róterdam hacia yacimientos de gas agotados en el Mar del Norte.
Los clientes de Porthos, entre los que se encuentran Shell, ExxonMobil, Air Liquide y Air Products, enviarán el CO2 a través de un gasoducto de acceso abierto en la región portuaria de Róterdam. Desde allí, el dióxido de carbono será transportado mediante un gasoducto submarino hasta una plataforma existente en el Mar del Norte, ubicada a unos 20 kilómetros de la costa. Esta plataforma inyectará el CO2 en campos de gas agotados, situados a más de 3 kilómetros de profundidad en una formación de arenisca porosa sellada.
La construcción del gasoducto terrestre de acceso abierto de Porthos marca el inicio del desarrollo de una futura red de CO2 en el noroeste de Europa, según ha señalado el puerto. Esta infraestructura podría servir también para futuros proyectos, como Aramis, con una capacidad de 10 millones de toneladas de CO2 en tierra y 2,5 millones de toneladas transportadas anualmente.
El proyecto Porthos ha recibido 102 millones de euros (112 millones de dólares) de mecanismo «Connecting Europe Facility», y es el primer proyecto a gran escala de transporte y almacenamiento de CO2 en la Unión Europea. La ministra de Política Climática y Crecimiento Verde de los Países Bajos, Sophie Hermans, ha destacado la importancia del CCS para alcanzar los objetivos climáticos. Según Hermans, la construcción del primer sistema de transporte y almacenamiento de CO2 a gran escala en los Países Bajos permitirá a la industria reducir sus emisiones y mantener su competitividad en el país.