La empresa energética nórdica Gasum ha establecido un acuerdo de suministro con la naviera Hapag-Lloyd para proveerle bio-GNL (gas natural licuado) durante los años 2025 y 2026. Este combustible será utilizado para los buques portacontenedores que operarán entre Singapur y Róterdam, en cumplimiento con el proyecto ZEMBA (Zero Emission Maritime Buyers Alliance), del cual Hapag-Lloyd es parte. Este acuerdo representa un paso clave hacia la meta de la naviera alemana de alcanzar la neutralidad de carbono para 2045.
El bio-GNL ha ganado popularidad en la industria marítima debido a su capacidad de reducir hasta un 90% las emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con los combustibles fósiles. Hapag-Lloyd será una de las primeras navieras en firmar un contrato de suministro a gran escala de este combustible, mientras que Maersk también ha anunciado recientemente su intención de asegurar acuerdos de compra de bio-GNL como parte de su programa de modernización de flota para reducir las emisiones en esta década. Esta tendencia se ve impulsada por las preocupaciones en torno al suministro y coste del metanol como combustible marino.
Hapag-Lloyd fue seleccionada en abril de 2024 como la ganadora del primer acuerdo de compradores de ZEMBA, una alianza que agrupa a grandes cargadores como Amazon, Patagonia, Bauhaus, New Balance, Nike y REI. Estos cargadores se han comprometido a adquirir más de mil millones de TEU millas en la ruta entre Singapur y Róterdam durante 2025 y 2026. Como parte del acuerdo, Hapag-Lloyd se ha comprometido a ofrecer un servicio de biometano, basado en residuos y certificado de manera independiente, que pueda lograr al menos un 90% de reducción en las emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con el transporte marítimo impulsado por combustibles fósiles.
El concepto de ZEMBA se basa en la idea de que al agrupar la demanda, se puede acelerar la transición hacia combustibles más limpios en el sector marítimo. Las navieras participantes compiten por el contrato con la seguridad de contar con volúmenes y demanda garantizados que ayuden a compensar los costos asociados.
Gasum, por su parte, bunkereará los buques de Hapag-Lloyd con un total de 20,000 toneladas métricas de bio-GNL durante el periodo 2025-2026. Estos buques operarán en la ruta entre Singapur y Róterdam, lo que lanzará efectivamente un corredor verde de larga distancia.
Jacob Granqvist, vicepresidente de la división marítima de Gasum, ha destacado que este acuerdo demuestra el aceleramiento de la transición verde en el sector del transporte marítimo. “Necesitamos la colaboración de todos para impulsar este esfuerzo, y el uso de bio-GNL en el transporte marítimo es una manera efectiva de reducir emisiones ya hoy, en lugar de esperar al futuro”, comentó Granqvist.
El bio-GNL de Gasum se produce a partir de residuos como biodesperdicios, lodos de depuradora, estiércol y otros subproductos industriales y agrícolas. Este combustible, que en promedio reduce un 90% las emisiones en comparación con el combustible fósil, puede utilizarse en todas las aplicaciones donde se emplea gas natural, incluyendo el transporte por carretera y marítimo, así como en la industria. Además, los residuos sólidos y líquidos generados en el proceso de producción de biogás son procesados y utilizados como fertilizantes en la agricultura o como materia prima en procesos industriales.
Gasum produce biogás en sus 17 plantas ubicadas en Finlandia y Suecia, y cuenta con contratos de suministro con otros socios. La compañía tiene como objetivo ofrecer siete TWh de gas renovable para 2027, lo que supondría una reducción combinada de 1,8 millones de toneladas de CO2 al año.