Sea-Intelligence ha analizado las calculadoras de emisiones de carbono en línea proporcionadas por los miembros de la OCEAN Alliance, evaluando en particular el envío de un TEU en la ruta Shanghái-Róterdam. El estudio ha revelado importantes diferencias en la metodología utilizada por las navieras, lo que complica la comparación precisa entre ellas.
CMA CGM ha incluido resultados para tres de los cinco servicios de la OCEAN Alliance, mientras que Evergreen y Orient Overseas Container Line Ltd. (OOCL) han proporcionado métricas para todos los servicios. OOCL, además, ha incorporado datos de su servicio LLX, que no forma parte de la alianza. Por su parte, COSCO solo ha presentado una medición correspondiente a su servicio AEU3.
El análisis sugiere que cambiar de CMA CGM a OOCL podría reducir potencialmente las emisiones de carbono en un 71%. Sin embargo, Sea-Intelligence ha señalado que esta cifra no es precisa, ya que la carga se transporta en el mismo buque subyacente, lo que evidencia las variaciones significativas en los enfoques metodológicos, en particular el uso del método «Well-to-Wake» por parte de CMA CGM.
Para evitar este problema específico, Sea-Intelligence ha considerado excluir a CMA CGM de la comparación y centrar la evaluación entre OOCL y Evergreen. Esta nueva comparación sugiere una posible reducción de emisiones de hasta un 42%.
Alan Murphy, CEO de Sea-Intelligence, ha expresado su preocupación ante estas divergencias metodológicas, afirmando que «es completamente imposible para los cargadores utilizar las calculadoras de carbono de las navieras para cualquier tipo de análisis comparativo significativo. Algunas calculadoras pueden ser metodológicamente sólidas por sí mismas, pero con el tiempo, las navieras han comenzado a divergir aún más en sus elecciones metodológicas, llevándonos a un punto en el que ahora es aún menos informativo desde una perspectiva comparativa que hace 13 años, cuando realizamos este análisis por primera vez».