Dos alumnas de la Sección de Educación Permanente (SEP) de Tarifa han impulsado una iniciativa para valorizar las algas invasoras que afectan las costas gaditanas. Esta propuesta busca no solo mitigar el impacto ambiental y económico del alga Rugulopteryx okamuare, sino también ofrecer una solución innovadora para la agricultura local.
Luz Pelayo y Mari Luz Caballero, responsables del proyecto, han desarrollado un fertilizante a partir de estas algas invasoras que ha mostrado resultados positivos en la mejora de la salud de los alcornocales en la zona. Según Pelayo, este fertilizante ha logrado mejorar en un 15% la condición de los árboles afectados por la seca en seis alcornocales de la Finca La Almoraiba, donde se lleva probando desde hace dos años.
El proyecto ha obtenido el segundo premio en el concurso Concienciarte 2023, organizado por el Parque Natural del Estrecho. La propuesta de las alumnas no solo pretende reciclar un problema ambiental en un recurso útil, sino también ofrece una alternativa para reducir los costos asociados a la retirada de estas algas de las playas, una tarea que supone un gasto considerable para los ayuntamientos de la zona.
La recolección de las algas se realiza bajo una autorización municipal en las playas de Tarifa, una de las más afectadas por la presencia de estas especies invasoras, que este verano ha alcanzado las 9.000 toneladas. Además, las impulsoras del proyecto están explorando otros posibles usos para estas algas, como en la industria cosmética, en la que Pelayo también trabaja.
Esta iniciativa se suma a las voces que, desde el Ayuntamiento de Tarifa, solicitan al Ministerio de Transición Ecológica la posibilidad de comercializar estas algas, en un intento por convertir un problema medioambiental en una oportunidad económica y sostenible.