El ejercicio 2023 fue un año marcado por importantes logros y desafíos para el Puerto de La Coruña, tal como refleja la Memoria Anual publicada por la Autoridad Portuaria. Entre los hitos más relevantes se encuentran la puesta en marcha de la terminal petrolera de Langosteira, el establecimiento de nuevos récords en el tráfico de cruceros y en los movimientos del Puerto Exterior, así como la reanudación de las conversaciones institucionales para el desarrollo de la fachada marítima de la ciudad.
En cuanto a los tráficos portuarios, 2023 finalizó con un descenso del 6,2% en comparación con el año anterior, una caída atribuida principalmente a la reducción en la demanda de productos siderúrgicos en Alemania, la disminución en la importación de petróleo y, especialmente, al parón en los envíos de carbón hacia el norte de Europa, que habían registrado un notable incremento en 2022 debido a la guerra en Ucrania. A pesar de este descenso, los 13,9 millones de toneladas operadas durante el año pasado se sitúan entre los mejores registros históricos del puerto, consolidando su posición en la franja alta de los últimos años, tras el excepcional crecimiento del 25% alcanzado en 2022.
En términos económicos, el ejercicio se saldó con un resultado de explotación positivo de 2 millones de euros, aunque el resultado global fue negativo, con pérdidas de 3,3 millones de euros. Este resultado se debió a la significativa subida de los tipos de interés, que generó un resultado financiero negativo de 7,8 millones de euros. Para mitigar el impacto de estos intereses en el futuro, la Autoridad Portuaria alcanzó un acuerdo con Puertos del Estado que fija un tipo de interés estable hasta 2026, a cambio de una amortización anticipada de 10 millones de euros. Aunque esta medida afectó a la tesorería, permite eliminar incertidumbres y refuerza la solvencia de la entidad a medio plazo, garantizando su capacidad para acometer las inversiones necesarias tanto en el Puerto Exterior como en el interior.
Entre los aspectos más positivos del año, destaca el continuo desarrollo del Puerto Exterior, que alcanzó un récord de 6 millones de toneladas en tráfico, impulsado por la firme apuesta de las empresas operadoras. Estas compañías han seguido ampliando y modernizando sus instalaciones, implementando circuitos cerrados para la descarga de graneles, lo que ha contribuido a este éxito. Asimismo, avanzaron las obras del acceso ferroviario y se realizaron progresos en los proyectos vinculados al Green Port, especialmente en la generación de hidrógeno y amoniaco verdes, así como en la eólica marina. Las solicitudes para el desarrollo de la eólica offshore auguran la creación de un importante hub de construcción y ensamblaje de componentes, con un impacto positivo en el empleo y la economía local, aunque será necesario afrontar significativas inversiones en la habilitación de la zona sur del puerto.
En cuanto al sector turístico, el Puerto de La Coruña estableció un nuevo récord en el tráfico de cruceros, con 130 escalas y 323.991 pasajeros, que generaron un impacto económico de 30 millones de euros en la región. Sin embargo, el sector pesquero experimentó un descenso del 3%, reflejo de las dificultades generales que enfrenta esta industria.
En el ámbito de la relación puerto-ciudad, 2023 fue un año muy positivo, con la apertura de espacios portuarios a usos ciudadanos, incluyendo eventos culturales como la tercera exposición promovida por la Fundación Marta Ortega y diversos conciertos y festivales en el muelle de Calvo Sotelo, que gozaron de gran aceptación.
El año también fue crucial por la reanudación de las negociaciones entre las administraciones para abordar la transformación de la fachada marítima y la solución a la deuda derivada de la construcción del Puerto Exterior. Estas conversaciones culminaron a finales de 2023 con la creación de la Comisión Coruña Marítima, que aglutina a las instituciones con competencias sobre los espacios portuarios y ferroviarios, y los grupos políticos municipales.