La compañía Cepsa ha registrado un aumento significativo en su EBITDA de CCS, alcanzando los 1.099 millones de euros durante el primer semestre de 2024, en comparación con los 742 millones de euros del mismo periodo del año anterior. Este crecimiento ha sido impulsado por un entorno de mercado favorable para el sector energético y un incremento en las ventas de Cepsa Química.
El beneficio neto de CCS también ha mostrado una notable mejoría, situándose en 398 millones de euros, en contraste con los 145 millones de euros obtenidos en el primer semestre de 2023. Asimismo, el flujo de caja de las operaciones de Cepsa ha alcanzado los 735 millones de euros, superando los 416 millones de euros registrados en el mismo periodo del año anterior. Este sólido rendimiento financiero se ha logrado a pesar de la desinversión de sus activos de Exploración y Producción (E&P) en Abu Dabi el año anterior.
Gracias a la mejora de sus resultados, Cepsa ha incrementado sus inversiones totales hasta los 545 millones de euros, destinando el 45% de la inversión orgánica a proyectos sostenibles para avanzar en su estrategia Positive Motion. Además, la compañía ha contribuido con 2.077 millones de euros en impuestos en España durante el primer semestre de 2024, de los cuales 1.199 millones fueron pagados directamente y 878 millones recaudados por cuenta de Hacienda. Esta contribución incluye un pago de 122 millones de euros correspondiente al primer tramo del impuesto extraordinario a las empresas energéticas, basado en los ingresos por ventas de 2023, año en el que Cepsa registró pérdidas netas.
La deuda neta de la compañía se ha situado en 2.493 millones de euros, ligeramente por debajo de los 2.522 millones de euros del primer semestre de 2023. A pesar de ello, Cepsa mantiene una sólida posición de liquidez, con 5.412 millones de euros, reforzada por la emisión de bonos a 7 años por un valor de 750 millones de euros en abril, lo cual cubre los vencimientos de los próximos años.
En línea con su estrategia de Positive Motion, Cepsa ha anunciado un acuerdo para vender sus activos de E&P en Perú, tras la venta previa de sus activos en Colombia, ambas transacciones pendientes de aprobación regulatoria. Además, ha cerrado la adquisición de Ballenoil, ampliando su oferta a clientes del segmento de bajo coste y planeando incluir gradualmente servicios de recarga eléctrica y biocombustibles.
Cepsa también ha firmado un préstamo de 285 millones de euros con el Banco Europeo de Inversiones (BEI) para la construcción de la mayor planta de biocombustibles de segunda generación del sur de Europa, demostrando el apoyo de las principales instituciones financieras públicas a sus proyectos de transición energética. En junio, Cepsa Química inició la construcción de la primera planta química en España para la producción de geles hidroalcohólicos con capacidad para utilizar materias primas sostenibles.
Finalmente, Cepsa ha sido reconocida por EcoVadis, obteniendo la medalla de oro por su desempeño en materia de sostenibilidad (ESG) y situándose entre el 3% de las mejores empresas a nivel mundial por segundo año consecutivo. Esto refleja el compromiso continuo de la compañía con la sostenibilidad ambiental, social y de buen gobierno.
