Las emisiones de carbono del transporte marítimo aumentan 23 millones de toneladas en el primer semestre del año

Las rutas más largas para evitar ataques en el Mar Rojo y las sanciones a Rusia son factores clave del incremento

Las emisiones de carbono del sector del transporte marítimo han aumentado en 23 millones de toneladas durante la primera mitad del año, en parte debido a que las embarcaciones han optado por rutas más largas para evitar ataques en el Mar Rojo. Este incremento del 6% respecto al año anterior, equivalente a la cantidad anual emitida por seis plantas de energía a carbón, ha elevado las emisiones del sector a aproximadamente 450 millones de toneladas, según datos de Marine Benchmark, que utiliza datos de rastreo de barcos para calcular estas cifras.

El aumento ha sido más significativo entre los buques portacontenedores, que han emitido aproximadamente un 15% más en el mismo período. Estos datos subrayan la dificultad que enfrenta el sector para alcanzar los objetivos de emisiones establecidos por su regulador global. Aunque el sector ha manifestado repetidamente su intención de volverse más ecológico, el reciente incremento prolonga una tendencia a largo plazo, impulsada en parte por factores fuera del control de la industria.

Uno de los factores contribuyentes ha sido los ataques de los militantes hutíes de Yemen, quienes durante meses han atacado a buques en la zona del Mar Rojo en protesta por la guerra de Israel con Hamas. Esto ha obligado a los barcos a navegar alrededor de Sudáfrica en lugar de atravesar el Canal de Suez, añadiendo miles de millas a los viajes.

Existen otros ejemplos de cargamentos que ahora recorren distancias más largas debido a las sanciones impuestas a Rusia por su invasión de Ucrania. Grandes volúmenes de crudo y combustible que históricamente se enviaban a la Unión Europea ahora se transportan a países que aún están dispuestos a recibir esos suministros, como India, China y Brasil.

La Organización Marítima Internacional (OMI) ha establecido un objetivo no vinculante para que el sector alcance cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para mediados de siglo. Sin embargo, alcanzar ese objetivo requerirá una transformación significativa de una industria que aún depende en gran medida de los combustibles fósiles.

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