Como cada 16 de julio, las “gentes de mar” celebran la festividad de la Virgen del Carmen, patrona de marineros y pescadores, como protectora de la gente de mar.
La historia de esta veneración se remonta a siglos atrás, cuando los marineros y pescadores, enfrentándose a los peligros del mar, buscaron amparo en la Virgen del Carmen. Conocida por su manto protector, la Virgen ha sido invocada en momentos de tormenta y adversidad, convirtiéndose en un pilar espiritual para quienes dependen del mar para su sustento.
El impacto de la Virgen del Carmen trasciende lo religioso, reforzando la identidad y cohesión de las comunidades costeras. La devoción a la Virgen se convierte en un punto de encuentro donde se entrelazan la fe, la tradición y la cultura marítima, promoviendo un sentido de unidad y pertenencia.
En definitiva, las festividades en honor a la Virgen del Carmen no solo celebran una tradición ancestral, sino que también destacan la resiliencia y dedicación de la gente de mar, quienes encuentran en su patrona un faro de guía y protección en su vida cotidiana.
En todos los municipios costeros del Campo de GIbraltar y el resto del mapa nacional, se conmemora esta festividad que nos sirve para felicitar, desde El Estrecho Digital, a quienes a diario tienen su sustento en las aguas que nos rodean y que bañan las costas del mundo.