Acerinox ha anunciado que la planta de Los Barrios operará con tres turnos en lugar de los cinco habituales. La empresa ha informado que esta modificación será comunicada a la representación legal de los trabajadores a la mayor brevedad posible. Los trabajadores llevan en huelga indefinida desde el 5 de febrero por discrepancias en la negociación del convenio colectivo.
En un Hecho Relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la empresa ha justificado esta decisión por las condiciones de mercado y los resultados económicos de los últimos años. Además, ha señalado la necesidad de implementar un nuevo modelo organizativo y de producción. Este anuncio coincide con las concentraciones y preparativos para acampadas que los trabajadores han iniciado en el centro de Algeciras.
José Antonio Gómez Valencia, portavoz del comité de huelga, ha acusado a la empresa de «falta de respeto» hacia la plantilla por su «silencio» tras la negativa de los trabajadores a aceptar la propuesta de convenio presentada por el Consejo Andaluz de Relaciones Laborales (CARL). «La empresa está jugando a tenernos con la incertidumbre, cosa que no entendemos, porque nos pidieron que llevásemos a votación una propuesta, lo hicimos y salió que no», ha declarado Gómez Valencia a los medios durante una concentración de dos horas.
En paralelo, Acerinox ha comunicado que cesará su actividad en la fábrica de Bahru Stainless, ubicada en Malasia. Los clientes de dicha planta ya han sido informados y el suministro se realizará desde otras fábricas del grupo. Esta decisión estaba en estudio desde noviembre, cuando la empresa ya contemplaba finalizar su actividad en Malasia.
Acerinox opera la planta de Bahru Stainless en Johor Bahru desde 2011. Sin embargo, los planes iniciales no se cumplieron debido a la escalada de la producción en China, que provocó una caída en los precios del acero inoxidable en el sudeste asiático. La planta ha acumulado más de 500 millones de euros en pérdidas en los últimos cinco años. Por ello, la empresa ha dejado de considerarla un activo estratégico y está abierta a la posibilidad de desinversión si surge alguna oferta.