Esta mañana se ha celebrado en Madrid la Junta de Accionistas de Acerinox, en la que ha participado José Antonio Gómez Valencia, portavoz del comité de huelga, que ha tomado la palabra para representar no solo a los empleados de la compañía, sino también a los trabajadores que poseen acciones de la empresa.
Gómez Valencia ha expresado la importancia de la inversión en la fábrica de Cádiz, un lugar clave en los orígenes y el desarrollo de Acerinox, destacando la necesidad de no olvidar a los más de 1.800 trabajadores que desempeñan sus labores allí. El portavoz del comité de huelga, con un tono firme pero conciliador, explicó cómo los trabajadores han adquirido acciones de la empresa siempre que han podido, demostrando su confianza y compromiso con el crecimiento de la misma. «No sólo somos parte de la fuerza laboral, sino también co-inversionistas en esta trayectoria empresarial», señaló, estableciendo un puente entre los intereses de los trabajadores y los de los accionistas.
El portavoz ha destacado la profesionalidad y el compromiso de estos trabajadores, quienes han enfrentado desafíos significativos, incluida la reciente pandemia, y han contribuido activamente a la continuidad y el progreso de la empresa. Ha pedido que no se ignore la necesidad de una remuneración justa y condiciones laborales que permitan la conciliación familiar, recalcando la importancia de este aspecto en el actual clima económico. Además, ha hecho un llamamiento a la dirección para que reconozca y valore el esfuerzo continuo de su plantilla, que ahora lleva casi ochenta días en huelga.
Respondiendo a estas reicindicaciones, Carlos Ortega Arias-Paz, presidente del Consejo de Administración de Acerinox, reconoció la importancia estratégica de la fábrica de Cádiz y aseguró que la atención hacia esta no ha disminuido. «Es uno de los temas recurrentes en cada reunión del consejo, y les aseguro que no está ni estará olvidada», afirmó Ortega, quien también compartió su perspectiva personal como accionista a largo plazo, reafirmando su confianza en la viabilidad y el futuro de Acerinox.
Por su parte, Bernardo Velázquez Herreros, consejero delegado de Acerinox, profundizó en el compromiso económico de la empresa con la planta, mencionando las inversiones anuales significativas destinadas a mantener la competitividad y la modernización de las instalaciones. «Entiendo la conexión sentimental y profesional que muchos tenemos con este lugar, y estoy seguro de que llegaremos a un acuerdo que beneficie a todos, priorizando el bienestar de nuestros trabajadores y la sostenibilidad de nuestra empresa», ha comentado Velázquez.