La playa de La Ballena, en Rota, ha sido escenario, en las últimas horas, de la liberación de tres tortugas marinas de la especie Caretta caretta, también conocidas como tortugas bobas, como resultado del trabajo conjunto entre pescadores locales, instituciones y organismos dedicados a la protección y el estudio de la fauna marina.
Estas tortugas, bautizadas como ‘Andresín’, ‘Saray II’ y ‘María Rocío’, fueron rescatadas en condiciones críticas por miembros de la cofradía de pescadores de Sanlúcar de Barrameda. Posteriormente, fueron trasladadas al puerto de Bonanza y de ahí al Centro de Gestión del Medio Marino Andaluz (Cegma) del Estrecho, donde recibieron los cuidados necesarios para su recuperación.
El acto de liberación contó con la presencia de Óscar Curtido, delegado territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía, junto con representantes municipales de Rota y miembros del equipo técnico de la Junta de Andalucía. También participaron integrantes del proyecto SOS Caretta, coordinado por la asociación Hombre y Territorio en colaboración con la Fundación Cepsa, Seashore Environment and Fauna y otros entes dedicados a la protección ambiental. Destacó especialmente la colaboración de la cofradía de pescadores de Sanlúcar de Barrameda, cuyo papel fue fundamental en el rescate de estas tortugas.
Durante el evento, Curtido resaltó la importancia de la cooperación entre las distintas entidades y el sector pesquero para la protección de la biodiversidad marina en Andalucía. Además, subrayó el valor de iniciativas como SOS Caretta en la conservación de especies amenazadas y en la sensibilización sobre la importancia de la fauna marina.
En el acto han participado escolares del colegio Nuestra Señora de los Reyes de Bonanza, hijos e hijas de pescadores, que tuvieron la oportunidad de presenciar de primera mano la devolución de estas tortugas a su hábitat natural, cerrando así el círculo iniciado por sus padres con el rescate.
Patricio Peñalver, en representación de SOS Caretta, destacó el papel crucial del sector pesquero en la preservación de la diversidad marina y enfatizó en la relevancia de involucrar a las nuevas generaciones en estas actividades de conservación. Desde el inicio de SOS Caretta, aproximadamente 50 tortugas marinas han sido rescatadas, con la cofradía de pescadores de Sanlúcar de Barrameda jugando un papel protagonista en el salvamento de 39 de ellas.