El alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix, ha insistido en su firme oposición a la instalación de un fondeadero de buques en la costa levantina de la localidad, según lo publicado en el Boletín Oficial del Estado. Esta propuesta, impulsada por la Autoridad Portuaria Bahía de Algeciras y apoyada por diversos grupos empresariales, ha generado un debate significativo en la comunidad local.
Ruiz Boix ha anunciado que el Ayuntamiento presentará alegaciones formales contra el proyecto, destacando ya la realización de reuniones de coordinación para su elaboración. La primera de estas reuniones, dirigida por el teniente de alcalde Óscar Ledesma, ha contado con la participación de otros miembros del gobierno municipal, técnicos y representantes de empresas turísticas de la zona.
El alcalde recuerda que desde 2016, el municipio se ha posicionado unánimemente en contra de tales proyectos, argumentando que los fondeaderos existentes dentro de la bahía de Algeciras son suficientes. Según Ruiz Boix, estos fondeaderos, que cubren más de 1.332 hectáreas con capacidad para 33 buques, han demostrado ser más que adecuados para las necesidades del puerto de Algeciras, incluso teniendo en cuenta el aumento del tamaño y capacidad de los buques en años recientes.
La ubicación propuesta del fondeadero abarcaría casi 10 kilómetros del litoral sanroqueño, desde Alcaidesa La Línea hacia Manilva, lo que, según el alcalde, podría afectar adversamente al turismo y al medio ambiente de la zona. Ruiz Boix ha insistido en que, San Roque ha logrado una convivencia exitosa entre la industria portuaria y el turismo deportivo, citando ejemplos históricos como la llegada de Cepsa y el desarrollo de Sotogrande en 1966.
El alcalde ha expresado su preocupación por las posibles repercusiones negativas que un nuevo fondeadero podría tener en el turismo de calidad de la región. Esta área, que cuenta con numerosas instalaciones de golf, canchas de polo y más de mil plazas hoteleras, se enfrenta a la posibilidad de una expansión hotelera que alcanzará las 3.000 plazas en los próximos cuatro años.
El plazo para presentar alegaciones finaliza el 17 de abril, y el Ayuntamiento ha declarado su intención de oponerse firmemente al proyecto. Ruiz Boix acusa a la Autoridad Portuaria y a grupos de interés relacionados de priorizar el crecimiento de su sector en detrimento del turismo deportivo de alta calidad y de otros sectores económicos de la zona.