Cepsa ha culminado con éxito una emisión de bonos por un valor de 750 millones de euros, siendo esta la mayor oferta de su historia y superando las emisiones previas debido a una notable sobredemanda. Esta operación no solo refleja el fuerte atractivo de Cepsa para los inversores, sino que también marca su regreso a los mercados de capitales tras un período de cuatro años. La emisión ha cerrado con un cupón anual de 4,125% y un vencimiento en abril de 2031.
Además, esta emisión incorpora un elemento innovador al combinarla con una recompra parcial de su bono con vencimiento en febrero de 2025, demostrando así una estrategia financiera sofisticada. Se espera que los bonos sean admitidos a cotización oficial y a negociación en el mercado regulado de la bolsa irlandesa. Esta maniobra permitirá a Cepsa reforzar su posición de liquidez y diversificar sus fuentes de financiación, incrementando al mismo tiempo el vencimiento medio de su deuda.
Con esta operación, Cepsa se convierte en la primera compañía española del sector en acceder al mercado de bonos en 2024, y la segunda en Europa. Este paso es significativo para reforzar la estructura de capital de la empresa y respalda su ambicioso plan de inversiones enmarcado en la estrategia de transformación Positive Motion. Dicha estrategia tiene como objetivo posicionar a Cepsa como un referente europeo en la producción de hidrógeno verde, biocombustibles de segunda generación (2G) y en el despliegue de una red de cargadores eléctricos ultrarrápidos.
Para la realización de esta operación, Cepsa ha contado con el asesoramiento de reconocidas entidades financieras. HSBC, Santander y SMBC han actuado como coordinadores globales, mientras que BBVA, BofA Securities y HSBC han colaborado en la oferta de recompra parcial de su bono con vencimiento en febrero de 2025.