El Puerto de Sevilla ha iniciado el proceso de licitación para la redacción del proyecto básico de un nuevo Puesto de Control Fronterizo (PCF), que se ubicará en la Zona de Actividades Logística (ZAL), sustituyendo las instalaciones actuales que han quedado obsoletas. La necesidad de una instalación de mayor capacidad ha sido reconocida desde hace tiempo por la Autoridad Portuaria.
La decisión de erigir una nueva infraestructura sigue un análisis exhaustivo de varias alternativas y forma parte del plan de inversiones previsto por el Puerto de Sevilla. El proyecto básico, con un presupuesto de 205.700 euros (IVA incluido), contempla un plazo de ejecución de seis meses. Este proyecto detalla la participación de varios organismos en el control e inspección de mercancías, incluyendo sanidad animal, sanidad vegetal, sanidad exterior, Aduanas y el Servicio Oficial de Inspecciones, Vigilancia y Regulación de las Exportaciones (Soivre).
El nuevo recinto aduanero dispondrá de dos áreas claramente diferenciadas: una para productos destinados al consumo humano, tanto de origen animal como no animal, y otra para productos no destinados a dicho consumo.
El actual PCF del Puerto de Sevilla, ubicado en el Muelle de Batán-Puerto Oeste, cuenta con instalaciones para la inspección sanitaria, veterinaria y de calidad de productos procedentes de terceros países, tanto para consumo humano como no humano. Entre estas instalaciones se incluyen dos laboratorios, una cámara congeladora de 100 metros cúbicos, dos cámaras refrigeradoras del mismo tamaño, un almacén de temperatura ambiente y tres muelles de descarga. Esta información se encuentra disponible en la página web de la Autoridad Portuaria.