El sector de la automoción en Estados Unidos enfrenta una nueva interrupción en su cadena de suministro debido al reciente colapso del puente ‘Francis Scott Key’ en Baltimore. Este incidente representa un obstáculo adicional para un sector aún en proceso de recuperación de los efectos adversos generados por la pandemia.
John Lawler, director financiero de Ford Motor Company, expresó en una intervención en Bloomberg TV la importancia del puerto de Baltimore en las operaciones logísticas del sector y el impacto significativo que este suceso podría tener. Ford ya está trabajando en alternativas, considerando desviar piezas hacia otros puertos en la costa este o a diferentes partes del país.
General Motors (GM) también ha tomado medidas para redireccionar los envíos de vehículos que normalmente pasan por Baltimore, comunicando un esperado «impacto mínimo» en sus operaciones a raíz del cierre del puerto. Esta situación emerge en un momento en que el sector de la automoción en Estados Unidos experimenta una normalización de sus inventarios tras la crisis de suministro de semiconductores y otros componentes clave durante la pandemia de Covid-19.
Baltimore, que ha jugado un papel central en la manipulación de vehículos en EE.UU., con más de 847.000 unidades procesadas el último año, es vital para fabricantes europeos como BMW, Volkswagen y Mercedes-Benz, quienes han establecido instalaciones cercanas al puerto para la gestión de sus envíos. Según datos de Bloomberg, Mazda lideró las importaciones a través de este puerto en el presente mes, seguida de Mercedes-Benz, Subaru, Mitsubishi y Volkswagen.
Volkswagen, que manejó aproximadamente 100.000 vehículos a través de Baltimore el año pasado, ha indicado la posibilidad de retrasos en el transporte terrestre debido al accidente. BMW, por su parte, no anticipa «ningún impacto inmediato en nuestro negocio», aparte de posibles demoras menores en el tráfico.
El incidente del puente involucró al portacontenedores ‘Dali’, de la empresa Maersk, guiado por un piloto local, una práctica estándar en la navegación portuaria. Las autoridades de Maryland, lideradas por el secretario de Transportes Paul Wiedefeld, están investigando las causas que llevaron a la nave a desviarse de su ruta, provocando el derrumbe del puente.
Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Interior de EE.UU., ha confirmado que no existen indicios de que se trate de un acto intencionado. El FBI se ha sumado a la investigación, y la Policía local, bajo la dirección de Richard Worley, ha descartado también la hipótesis de un ataque terrorista.
Synergy Group, armador del ‘Dali’, ha iniciado una investigación interna y colabora estrechamente con las agencias estatales y federales. La Guardia Costera y otras autoridades locales han sido informadas y participan activamente en el esclarecimiento de los hechos.