la compañía Brittany Ferries está implementando importantes mejoras en su buque insignia, el Pont-Aven, mediante la adición de una «cola de pato» en la popa durante su parada técnica anual. Esta modificación, que extiende la eslora del barco en aproximadamente 3 metros, busca optimizar el rendimiento hidrodinámico del buque y se espera que contribuya a un ahorro de hasta un 10% en combustible.
La hidrodinámica juega un papel crucial en la sostenibilidad de las operaciones navieras. Reducir la resistencia al avance en el agua disminuye el consumo de combustible y, en consecuencia, las emisiones de gases. Es por esto que el diseño del casco, característico de los buques más recientes de Brittany Ferries como el Galicia, Santoña y Salamanca, es tan importante. La elección de añadir una «cola de pato» al Pont-Aven, que inició operaciones en 2004, se enmarca en este esfuerzo por mejorar la eficiencia.
El proyecto se inició con simulaciones de dinámica de fluidos computacional realizadas por Chantiers d’Atlantique en Francia. Los ingenieros exploraron inicialmente modificaciones en la proa, pero las simulaciones revelaron que los mayores beneficios en términos de ahorro de combustible se encontraban en la popa. Las simulaciones indicaban una reducción de resistencia de alrededor del 10% con la adición de la «cola de pato». Para verificar estas simulaciones, se llevaron a cabo pruebas en el Hamburg Ship Model Basin (HSVA) en Alemania, donde se probó el casco original del Pont-Aven en 2002. Se creó un modelo a escala de 7 metros del casco del buque con modificaciones en la popa, y se testearon tres diseños de «cola de pato» diferentes.
Los resultados mostraron mejoras evidentes, con una reducción de la resistencia alrededor de la popa. Esto es particularmente significativo para el Pont-Aven, ya que compensa el peso adicional de los sistemas de depuración de emisiones atmosféricas (scrubbers) instalados en 2015.
Los scrubbers, que funcionan de manera similar a los catalizadores de los coches, eliminan contaminantes como el azufre de las emisiones. El Pont-Aven fue uno de los cinco buques de la flota de Brittany Ferries que se beneficiaron de una inversión de aproximadamente 90 millones de euros para la instalación de estos sistemas, con el apoyo de ADEME.
Tras seleccionar el diseño más eficiente de «cola de pato», los trabajos se han programado para coincidir con la parada técnica anual del buque. Además, Brittany Ferries ha colaborado con su socio Wartsila para mejorar el diseño de las hélices, lo que podría resultar en una mejora adicional de alrededor del 5% en la eficiencia de la propulsión cuando se instalen posteriormente en el Pont-Aven.