La situación en el Mar Rojo y en el Golfo de Adén sigue siendo volátil, por lo que la prioridad sigue siendo la seguridad de marinos, buques y carga, por parte de la naviera danesa Maersk. Ante esta situación, la compañía ha realizado cambios en su servicio ME2, de cara a ofrecer una mayor fiabilidad para su cadena de suministro en este entorno desafiante.
Por el momento, el servicio ME2 será desviado vía el Cabo de Buena Esperanza y la rotación será Jebel Ali, Emiratos Árabes Unidos – Mundra, India – Jawaharlal Nehru, India – Puerto Tánger, Marruecos – Algeciras, España – Salalah, Omán – Jebel Ali, Emiratos Árabes Unidos, lo que significa que el servicio girará en el Mediterráneo Occidental y las escalas en dirección Oeste a Salalah y Yeda han sido canceladas hasta nuevo aviso.
El primer viaje en dirección Este afectado por este cambio será el Maersk Gibraltar, que partirá del Puerto de Tánger, este 23 de enero, mientras que el primer viaje en dirección Oeste partirá de Salalah alrededor del 4 de febrero.
Para minimizar cualquier interrupción en el negocio de Maersk, los puertos de Algeciras y Tánger se utilizarán para conexiones hacia el norte de Europa y el Mediterráneo, no descartando escalas en Valencia y Vado en Italia. Por otra parte, los centros de Maersk en Salalah y Jebel Ali ofrecerán conexiones al resto de puertos en Medio Oriente.