La Autoridad del Canal de Suez (SCA) ha constatado una disminución significativa en el tráfico marítimo a través del canal, atribuible a los ataques perpetrados por los hutíes desde Yemen contra buques portacontenedores en el mar Rojo. Esta situación ha llevado a diversas compañías navieras a optar por rutas alternativas, como el desvío alrededor del continente africano por el cabo de Buena Esperanza.
Osama Rabie, presidente de la SCA, ha informado que durante las primeras dos semanas de 2024, los ingresos generados por el tránsito a través del Canal de Suez se redujeron en un 40% en comparación con el mismo período del año anterior. Además, se registró una caída del 30% en el número de tránsitos. Rabie ha subrayado que esta situación no solo afecta al canal, sino también a la economía global, reafirmando que el canal sigue siendo la ruta más segura y económica.
La decisión de las empresas de transporte marítimo de carga, incluyendo siete de las diez principales a nivel mundial, de utilizar la ruta alternativa se ha descrito como una medida temporal. Rabie ha señalado que esta alternativa implica unos 15 días adicionales de navegación, incrementando así los costes por consumo de combustible y salarios, según reportes del diario egipcio ‘Al Ahram’.
La economía de Egipto podría verse seriamente afectada por la situación de seguridad en el mar Rojo. El Canal de Suez es una fuente vital de ingresos y su importancia se ha incrementado tras la reciente expansión a dos carriles, que aumentó la capacidad de tránsito. En el periodo 2022-2023, los ingresos por peajes alcanzaron casi 9 mil millones de dólares, representando aproximadamente el 2% del PIB de Egipto. Estos ingresos son cruciales para el manejo de la deuda pública del país, que asciende a 165 mil millones de dólares.
Sin embargo, los ataques de los rebeldes hutíes han reducido drásticamente el tráfico por el canal, impactando negativamente en los ingresos. La mayoría de los grandes portacontenedores, así como un creciente porcentaje de buques cisterna y de carga general, están optando por la ruta del cabo de Buena Esperanza debido a la amenaza de seguridad. Según Rabie, el tránsito por el canal ha disminuido en un 30% en comparación anual, y los ingresos en dólares por peajes se han reducido en un 40%.
Paul Tourret, del instituto marítimo francés ISEMAR, señala que la estructura de tarifas del canal es un factor decisivo para los armadores al considerar la desviación. Al evitar el canal y navegar alrededor de África, el ahorro en peajes compensa el costo adicional de combustible, resultando en un precio total similar.
Esta tendencia creciente está afectando considerablemente las finanzas públicas de Egipto. El país debe afrontar pagos de 29 mil millones de dólares para el servicio de su deuda externa en 2024, una cifra inusualmente alta debido a los vencimientos de deuda principal este año.
Además, el conflicto en la vecina Gaza ha reducido los ingresos de Egipto por turismo, otra importante fuente de divisas que genera hasta 12 mil millones de dólares en un buen año.
A pesar del impacto material en los ingresos soberanos de Egipto, el gobierno no ha criticado públicamente a los rebeldes hutíes por sus acciones en el mar Rojo. La armada egipcia, la más grande del mundo árabe, no juega un papel prominente en la presencia internacional cerca del estrecho de Bab el-Mandeb.