El Puerto de Valencia afirma que continúa operando con normalidad, manejando tanto las rutas atlánticas y mediterráneas de los buques portacontenedores afectados por la crisis en el Mar Rojo. La situación ha obligado a algunos tráficos a desviarse por el sur de África para acceder al Mediterráneo. Según Néstor Martínez, Subdirector General de Desarrollo de Negocio de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), el puerto dispone de la capacidad necesaria para afrontar esta situación, habiendo superado ya los problemas iniciales relacionados con los retrasos en la navegación.
La crisis en el Mar Rojo, marcada por su peligrosidad, llevó a destacadas navieras a modificar sus rutas. Grandes buques de contenedores, con eslora de hasta 400 metros, dejaron de usar el Canal de Suez y sus habituales escalas mediterráneas, optando por rodear África vía el Cabo de Buena Esperanza. Esta alternativa, aunque más segura para las tripulaciones y las mercancías, añadió entre 10 y 12 días a la duración de sus travesías, impactando la cadena logística y los tiempos de llegada a Valencia.
Martínez asegura que el flujo regular de estos buques se está restableciendo, tranquilizando a usuarios, cargadores e importadores del Puerto de Valencia. Afirmó que la operatividad del puerto se mantiene, garantizando la continuidad de los proyectos de exportación e importación y la estabilidad de la cadena logística.
La experiencia adquirida durante la pandemia, según Martínez, ha reforzado la capacidad de respuesta de toda la cadena logística global, incluyendo puertos, transportistas y operadores. Enfatizó que no existe motivo de alarma actualmente y que los problemas iniciales, derivados de los retrasos de 10 a 12 días, han sido solucionados.
También destacó la adaptabilidad de importantes puertos mediterráneos, como Algeciras y Barcelona, así como los de Marruecos, en el manejo de grandes buques de contenedores. Mencionó que el Mar Mediterráneo está sirviendo como un punto central para la redistribución de mercancías, ya que los buques ya no pasan por otros puertos como Gioia Tauro, Pireo o Malta. Subrayó que, de momento, se está realizando un seguimiento normal de las operaciones marítimas y terrestres.
Martínez ha concluido afirmando la capacidad del puerto de Valencia para gestionar el incremento de tráfico, gracias a la holgura actual de las terminales y la coordinación con las navieras para garantizar la distribución de mercancías a países vecinos. La Autoridad Portuaria se mantiene en constante comunicación con las principales navieras para abordar cualquier eventualidad, reafirmando su compromiso como facilitador del comercio internacional.