El USS Gerald R. Ford, considerado el portaviones más grande y moderno de la Armada de los Estados Unidos, ha culminado su presencia en las aguas del mar Mediterráneo, iniciando su retorno al Atlántico navegando a través del Estrecho de Gibraltar. Este desplazamiento ocurre tras más de ocho meses de operaciones en Oriente Próximo, en medio del conflicto entre Israel y Hamás.
Con un coste de 12.800 millones de dólares, el USS Ford se posiciona como el portaviones más caro en la historia estadounidense. Esta embarcación de propulsión nuclear, con un desplazamiento de 100.000 toneladas, está equipada con dos reactores nucleares y cuatro ejes. Estas características le otorgan una capacidad destacada para recorrer largas distancias sin la necesidad de reabastecerse. El buque, con 1.100 pies de eslora (aproximadamente 335 metros) y 256 pies de manga (76 metros), puede albergar hasta 5.000 tripulantes y tiene capacidad para transportar hasta 80 aeronaves, incluyendo cazas como los F-35C y F/A-18E/F Super Hornet, además de helicópteros y drones.
En su reciente travesía, el USS Gerald R. Ford, acompañado del crucero USS Normandy, atravesó el Estrecho de Gibraltar hacia el Atlántico, marcando una de las últimas operaciones programadas de su despliegue, según declaraciones de la Sexta Flota de Estados Unidos.
Alejandro Sophian (@maritimegraphy), conocido por sus fotografías y vídeos marítimos, ha compartido en redes sociales imágenes impactantes del portaviones, expresando su entusiasmo por haber capturado el USS Gerald R. Ford como parte de un deseo personal.
Como anticipo de Reyes, me he pedido la captura del USS Gerald R. Ford (CVN-78) como parte de mi deseo especial.
In anticipation of epiphany, I have asked for the capture of the USS Gerald R. Ford (CVN-78) as part of my special wish. pic.twitter.com/nBP6pXj3OM
— @maritimegraphy (@maritimegraphy) January 5, 2024
Por otro lado, el USS Dwight D. Eisenhower, inicialmente destinado a relevar al Ford, fue reasignado a Oriente Medio, una estrategia que, de acuerdo con analistas, resultó ser mayormente exitosa. No obstante, existe preocupación sobre el impacto que podría tener un despliegue prolongado del Ford en su programa de mantenimiento y en el bienestar de la tripulación, aspectos fundamentales para la preparación de futuras misiones.
Durante su estadía en el Mediterráneo, el portaviones USS Gerald R. Ford participó en una variedad de entrenamientos, ejercicios y operaciones, destacando su rol activo en la región, tal como lo informó la Armada de Estados Unidos.