El sistema PortWatch del Fondo Monetario Internacional (FMI), desarrollado para analizar la exposición de las cadenas de suministro globales a interrupciones presentes y futuras, ha calificado al Canal de Suez como un «punto crítico notable». Este calificativo surge en un contexto donde se observa una disminución dramática en el tráfico, debido a los problemas de seguridad en las proximidades de Yemen. Según datos del FMI, el volumen de tráfico en la segunda mitad de diciembre disminuyó un cuarto desde que los principales operadores de portacontenedores comenzaron sus programas de desvío.
El FMI lanzó una versión beta de su herramienta analítica en noviembre, incorporando datos históricos diarios desde principios de 2019. Su objetivo es facilitar la investigación sobre problemas emergentes en puertos y su posible impacto en el comercio global y la economía.
Esta tendencia afecta significativamente no solo al comercio global, con aproximadamente un cuarto del comercio mundial y un tercio de los contenedores pasando por el canal, sino también a la economía de Egipto y países vecinos. La disminución en el tráfico está aislando a puertos en Arabia Saudita y Jordania, aunque algunos operadores mantienen servicios ad hoc a través del canal.
El promedio móvil de 7 días para el número de buques que transitan por el Canal de Suez ha mostrado una disminución constante en la segunda mitad de diciembre, comparado con un nivel estable que promediaba más de 70 tránsitos al día en la primera mitad del mes. El nivel descendió a los 60 tránsitos por día y, durante los últimos seis días a partir del 28 de diciembre, cayó a los 50, con un promedio de 7 días más reciente (2 de enero) de 56.5 buques. Los tránsitos han disminuido en un total del 14% desde el 15 de diciembre, según datos del FMI, con el promedio del 2 de enero de 2024 descendiendo un 17% en comparación con el nivel del año anterior.
Los sectores más afectados incluyen el petróleo, productos químicos y minerales no metálicos, destacando la dependencia europea del canal para sus suministros energéticos. Aunque el tráfico de petroleros se mantiene estable, los barcos de carga han disminuido en un 20%.
Además, alrededor de 20 grandes transportistas han anunciado programas de desviación, afectando a más de 200 portacontenedores. Empresas petroleras como BP y Equinor también están redirigiendo sus envíos. La ruta alternativa alrededor de África añade más de 5,000 millas y hasta dos semanas de tránsito, en contraste con los 55 barcos desviados por la Autoridad del Canal de Suez entre mediados de noviembre y diciembre, periodo en el que 2,218 barcos transitaron por el canal.
La Autoridad del Canal de Suez ha reconocido las tensiones en el Mar Rojo y su impacto en la navegación, lo que subraya la importancia estratégica y económica de este corredor marítimo. La situación actual requiere una monitorización continua para evaluar las implicaciones a largo plazo en el comercio global y las economías regionales.