El muelle de Calvo Sotelo en el puerto de La Coruña fue escenario de un simulacro diseñado para poner a prueba la respuesta de los sistemas de seguridad ante una situación de emergencia potencial durante la escala de un trasatlántico.
El ejercicio se inició durante un escaneo de rutina relacionado con la llegada del crucero «Bolette», durante el que se detectó una maleta sospechosa que en la pantalla mostraba cables y dispositivos electrónicos. De inmediato, se notificó a los responsables de seguridad del puerto, al consignatario del barco, al terminalista y al centro de control de la Autoridad Portuaria, ordenándose la evacuación de la terminal y activándose el Plan de Protección del Puerto. También se notificó a la Guardia Civil y la Policía Nacional, y se estableció un puesto de mando avanzado «in situ».
El operativo continuó siguiendo los protocolos establecidos en el Plan de Protección del Puerto, con un refuerzo en los controles de seguridad. La Guardia Civil llamó a los expertos en desactivación de explosivos (TEDAX), quienes inspeccionaron la zona, activaron el Plan de Autoprotección (notificando a los Bomberos y la Cruz Roja) y prepararon un área para la detonación controlada de la maleta. Finalmente, la normalidad se restableció, siendo la intervención de la Guardia Civil y la presencia de los Bomberos, las únicas necesarias.
Este simulacro permitió evaluar la efectividad de los protocolos y equipos ante situaciones de emergencia de este tipo. La Autoridad Portuaria agradeció la participación de todos los organismos involucrados en el ejercicio, así como a Corunna Cruise Terminal, la empresa consignataria Pérez y Cía, y los responsables del «Bolette» por su colaboración.