Los emblemáticos Talleres Pastoriza de Cádiz han sido demolidos por completo, marcando un hito en la transformación del polígono exterior de la Zona Franca. Las obras, que se llevaron a cabo en un tiempo récord de un mes y medio, han dado lugar a la apertura de nuevas oportunidades de desarrollo urbano y atracción de inversión privada en la ciudad.
La empresa Construcciones y Excavaciones Erri Berri S.L. se encargó de la demolición de las últimas edificaciones en desuso, que ocupaban una superficie construida de 2.885 metros cuadrados en una parcela de 2.372 metros cuadrados. Para garantizar la seguridad en la demolición, se utilizaron máquinas de gran tonelaje, incluida una especial equipada con pinzas hidráulicas de hasta 50 metros de alcance.
Uno de los desafíos clave fue la presencia de un Centro de Transformación eléctrico en servicio en las instalaciones, lo que requirió un trabajo cuidadoso realizado manualmente. Además, se llevó a cabo el aislamiento e impermeabilización de su cubierta.
El despeje y la limpieza de la parcela allanarán el camino para que el Consorcio inicie el desarrollo urbanístico, facilitando la creación de nuevas parcelas dotacionales que estimulen la inversión privada y generen actividad económica y empleo en la zona. Además, este derribo ha mejorado significativamente la imagen de una de las principales vías de acceso rodado a la ciudad a través del polígono exterior.
Estos trabajos completan la demolición de todo el conjunto de instalaciones de lo que fue ‘Talleres y Comercial Pastoriza’. La primera fase se llevó a cabo en los últimos meses de 2020 para permitir la urbanización de la Unidad de Ejecución UE-ZF-08 con el proyecto de Zona Base, que está cerca de su finalización.
El éxito del enfoque de trabajo de Zona Franca para Zona Base se aplicará nuevamente, reordenando y creando nuevos espacios productivos con servicios de infraestructuras completos en las futuras parcelas resultantes. Esta acción refuerza el compromiso de Zona Franca con la transformación del polígono exterior, en colaboración con el Ayuntamiento de Cádiz, para modernizar una de las áreas más importantes para la actividad económica y el crecimiento de la ciudad.
En los próximos días, se instalará un vallado perimetral de dos metros y medio de altura en la parcela, junto con una puerta de acceso del mismo material. Con el derribo de las naves Pastoriza, se pone fin a una industria que data de la década de los 70 del siglo pasado, relacionada con el sector naval, donde se llevaban a cabo trabajos de calderería para la fabricación de bloques y otros elementos metálicos para buques, así como la comercialización de materiales y herramientas orientados a esta industria.