El patrullero de altura ‘Atalaya’, con base en la estación naval de La Graña en Ferrol (Galicia), ha zarpado para llevar a cabo una importante operación de vigilancia y seguridad marítima. Durante esta misión, el buque desplegará su presencia naval en áreas estratégicas que incluyen la zona económica exclusiva (ZEE), la costa peninsular mediterránea, el Estrecho de Gibraltar y la isla de Alborán.
El propósito fundamental de esta operación es contribuir a garantizar la seguridad de los espacios marítimos de interés nacional como parte de las Operaciones de Presencia, Vigilancia y Disuasión de las Fuerzas Armadas. El ‘Atalaya’ opera bajo la supervisión del Mando Operativo Marítimo (MOM) y el control operativo del Mando de Operaciones (MOPS).
Además de su labor de vigilancia, el buque también asumirá responsabilidades relacionadas con la protección del patrimonio arqueológico sumergido y el control de la pesca en aguas españolas, en estrecha coordinación con el Centro de Operaciones y Vigilancia de Acción Marítima de la Armada (COVAM), según informaron fuentes de la Armada Española.
El ‘Atalaya’ no se limitará a las aguas nacionales, ya que también participará en apoyo a la operación ‘Sea Guardian’ de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), en una misión que tiene como objetivo el control y la protección de las rutas marítimas de comunicación más cruciales, así como la prevención de actividades ilícitas y tráfico no autorizado.
El patrullero ‘Atalaya’, dependiente del Mando de Unidades de Acción Marítima en Ferrol y parte integral de la Fuerza de Acción Marítima (FAM), desempeña un papel esencial en la protección de los intereses marítimos nacionales y el control de los espacios marítimos de soberanía e interés nacional. Además, su enfoque integral facilita la cooperación constante con diversas entidades gubernamentales relacionadas con asuntos marítimos.
En sus 30 años de servicio, el ‘Atalaya’ ha participado en numerosas operaciones, incluyendo África Partner Ship, Noble Centinela, Indalo, y tareas de vigilancia y seguridad marítima.
Las Operaciones de Presencia, Vigilancia y Disuasión desempeñan un papel crucial en la vigilancia de los espacios de soberanía, permitiendo la detección temprana de amenazas y una respuesta eficaz ante posibles crisis. Estas operaciones son coordinadas por los Mandos Operativos Terrestre, Marítimo, Aeroespacial y Ciberespacial, involucrando a unos 3.000 efectivos de las Fuerzas Armadas a diario bajo el control operativo del Mando de Operaciones.