La Autoridad Portuaria de Cartagena fue el anfitrión de la Jornada Sepor Commodities Exchange, que tuvo lugar como parte de la 56ª Feria Ganadera, Industrial y Agroalimentaria (SEPOR) de Lorca. Este encuentro resalta el papel crucial de la infraestructura logística del Puerto de Cartagena en el sector agrícola y ganadero de la Región de Murcia y sus alrededores.
José María Gómez, director general de la Autoridad Portuaria, subrayó la importancia del Puerto de Cartagena en la importación de productos agroalimentarios, con más de tres millones de toneladas movidas, y como el principal puerto europeo en exportación de ganado vivo, con un movimiento de 400,000 cabezas. Esta actividad, explicó Gómez, facilita la conexión segura, eficiente y sostenible entre productores y consumidores de todo el mundo a través de rutas marítimas.
El tráfico de agroalimentarios coloca a Cartagena como un puerto destacado en el sureste español, con más de tres millones de toneladas de materias primas agroalimentarias movidas hasta septiembre de 2023. Entre ellas se incluyen más de un millón de toneladas de maíz, 700,000 toneladas de habas de soja, 700,000 toneladas de trigo y 600,000 toneladas de cebada.
José María Gómez destacó que estas cifras en constante crecimiento, junto con las inversiones en desarrollo, posicionan al Puerto de Cartagena como el principal centro logístico y comercial de la Región, con servicios eficientes y tarifas competitivas.
El director general detalló las acciones que el Puerto de Cartagena está implementando, como la puesta en marcha del ferrocarril y su conexión con la estación de Algodor, el nuevo puesto de control fronterizo (PCF), la nueva terminal de ganado vivo en el muelle Príncipe Felipe y la futura Terminal Polivalente de Barlomar. Estas medidas fortalecerán aún más la posición del puerto en el transporte de cereales y ganado vivo, contribuyendo al crecimiento sostenible de la región.
La nueva terminal de ganado vivo en el muelle Príncipe Felipe, con una inversión de 9.7 millones de euros, permitirá ampliar la capacidad de carga y descarga de ganado, cumpliendo con las normativas europeas de bienestar animal y mejorando significativamente las instalaciones existentes.