El Puerto de Barcelona ha desempeñado un papel fundamental en la reintroducción de halcones peregrinos en la ciudad. Actualmente, se concentra un número significativo de parejas reproductoras en esta área, según se destacó en la jornada titulada «20 años del regreso del halcón a Barcelona». El evento fue organizado conjuntamente por el departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural; el Instituto Municipal de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Barcelona; y el Puerto de Barcelona.
La jornada inaugural contó con la presencia del director general del Puerto de Barcelona, José Alberto Carbonell; el director general de Políticas Ambientales y Medio Natural del departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat de Cataluña, Marc Vilahur; y la comisionada de Proyectos Estratégicos y Agenda 2030 del Ayuntamiento de Barcelona, Bàrbara Pons. Reunió a especialistas ambientales y representantes de entidades involucradas en el proyecto de reintroducción de halcones en la ciudad.
El proyecto de reintroducción del halcón peregrino en Barcelona se inició en 1999 como un enfoque innovador y pionero en la restauración del patrimonio natural urbano. Este esfuerzo se alineó con los objetivos establecidos en la Agenda 21, aprobada en la Conferencia de Río de 1992, que buscaba fomentar la naturalización de las ciudades y la preservación de la biodiversidad. El proyecto fue liderado por el Ayuntamiento de Barcelona con el apoyo de otras instituciones y organizaciones dedicadas a la protección de la naturaleza.
Entre los años 1999 y 2003, se liberaron un total de 47 halcones jóvenes en Barcelona, y a partir de 2003, comenzaron a formarse las primeras parejas reproductoras. Hasta el año 2023, se han registrado 264 nacimientos de halcones en el área de Barcelona.
El Puerto de Barcelona ofrece condiciones óptimas para mantener una población estable de halcones peregrinos. Dispone de edificios, estructuras altas y espacios abiertos que son ideales para la caza, así como una abundante población de palomas y tórtolas, que son las presas habituales en la dieta de estos halcones. Desde sus inicios, el Puerto se involucró en este proyecto, y este año, en colaboración con otras entidades, tiene previsto colocar tres emisores vía satélite para rastrear los movimientos de estos ejemplares.
En la actualidad, se han censado un total de 12 parejas reproductoras en el área de Barcelona, distribuidas de la siguiente manera: 5 en Barcelona ciudad, 4 en el Puerto de Barcelona, 2 en Hospitalet de Llobregat y 1 en Sant Adrià de Besòs. Estas aves crían en lugares emblemáticos como el templo de la Sagrada Familia, la torre de Collserola, la torre de Jaime I del teleférico del Puerto, o en las tres chimeneas de Sant Adrià de Besòs.
Entre las instituciones y organismos involucrados en este proyecto, destaca la entidad Galanthus, que ha estado presente desde sus inicios y continúa desempeñando un papel fundamental en tareas de seguimiento. Esto incluye la monitorización de los nidos, la instalación de cajas-nido, la anillación y marcado de los polluelos, así como la realización de actividades de comunicación y educación ambiental.