Maersk ha anunciado hoy la creación de una nueva empresa, C2X, destinada a la producción de metanol verde. La compañía ha seleccionado el puerto de Huelva como ubicación para el desarrollo de esta iniciativa, desestimando así otras opciones que se habían considerado, como el Campo de Gibraltar.
Este proyecto se enmarca dentro de los esfuerzos de Maersk por descarbonizar la industria naviera. Además de Huelva, la empresa está evaluando posibles emplazamientos cerca del Canal de Suez en Egipto, así como en Estados Unidos, India y Australia.
C2X, en la que Maersk posee una participación del 20%, tiene como meta la producción de 3 millones de toneladas de metanol verde al año para 2030. Actualmente, la demanda del sector se satisface principalmente con metanol convencional, un derivado de gas o carbón. Según proyecciones, el transporte marítimo añadirá alrededor de 10 millones de toneladas de demanda de metanol para finales de esta década.
Brian Davis, CEO de C2X, ha declarado que el objetivo principal del proyecto es «acelerar la disponibilidad de metanol verde a un precio razonable». Como parte de su estrategia para alcanzar emisiones netas cero para 2040, Maersk ya ha solicitado la construcción de hasta 19 barcos impulsados por este tipo de metanol. No obstante, los barcos mantendrán la capacidad de utilizar combustibles fósiles.
En relación a las críticas sobre la necesidad de CO2 para la producción de metanol verde, Davis ha reconocido el desafío y ha señalado la exploración de opciones para obtener carbono de fuentes biológicas o mediante proyectos de captura y almacenamiento de carbono.
Con un equipo de 60 profesionales de las industrias química y de energías renovables, C2X busca proporcionar a la industria química una alternativa libre de combustibles fósiles y extender potencialmente su oferta a otras compañías navieras. Para cumplir con sus objetivos para 2030, la empresa planea colaborar con socios externos para la financiación y ejecución de sus proyectos.