La Confederación Española de Pesca (Cepesca) ha lamentado la exclusión de los productos pesqueros de la lista de alimentos básicos que se beneficiarán de la prórroga de la rebaja del IVA, decidida en el Consejo de Ministros, con el objetivo de afrontar el incremento de precios en la cesta de la compra tras el conflicto bélico en Ucrania.
El sector pesquero, que ha solicitado en repetidas ocasiones la eliminación de este impuesto en sus productos al considerarlos indispensables para una dieta saludable, especialmente en el caso de los niños, estima que facilitar el acceso a este alimento para la población más vulnerable en medio de la actual escalada inflacionista supondría una reducción de ingresos para el Estado de menos de 500 millones de euros. Según los datos proporcionados por el sector, esta cifra es significativamente menor que los 14.000 millones de euros que el Sistema Nacional de Salud gasta anualmente para tratar enfermedades relacionadas con una alimentación deficiente.
Además de esto, los pescadores también expresan su decepción por la falta de respuesta del Gobierno a su solicitud, a pesar de haberla presentado en dos ocasiones. El sector envió una carta al presidente del Gobierno poco después de la promulgación del decreto anticrisis el 27 de diciembre de 2022, solicitando la inclusión de los productos pesqueros como alimentos básicos. Posteriormente, ante el silencio por parte de La Moncloa, pidieron una reunión con Pedro Sánchez, la cual tampoco obtuvo respuesta.
Según el sector, con la decisión del Gobierno vuelve a hacer perder la oportunidad de marcar un punto de inflexión y enviar un mensaje claro en favor de promover una alimentación saludable con productos de alto valor biológico como los productos pesqueros, que además tienen una huella de carbono reducida en su proceso de producción. También lamentan que España, siendo la mayor potencia pesquera de la Unión Europea (UE), no decida alinearse con Europa y otros países de nuestro entorno en este objetivo, utilizando diversas herramientas como la llamada «fiscalidad saludable».
El sector recuerda que esta estrategia alimentaria a medio plazo ya se está implementando en países como Irlanda, Malta y Reino Unido, que han decidido gravar con un IVA cero a los productos pesqueros, o Portugal, que aplica un IVA cero a siete productos pesqueros de consumo elevado desde marzo pasado. Otros países aplican un IVA reducido, como Luxemburgo (3%), Alemania, Chipre, Hungría y Polonia (5%), o Francia (5,5%). En España, los productos pesqueros están actualmente gravados con un IVA del 10%.
En los hogares españoles, el consumo de productos pesqueros ha disminuido un 20,4% entre 2008 y 2021, y entre enero y noviembre de 2022, este consumo registró una caída del 15,2%, según los últimos datos proporcionados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
El sector advierte que los malos hábitos alimenticios y la disminución en el consumo de productos de alta calidad acarrearán problemas de salud a medio plazo. En este sentido, España se sitúa como el cuarto país de la UE con mayor porcentaje de niños con sobrepeso u obesidad (41% en el caso de las niñas y 42% en el caso de los niños, según datos de COSI 2015-2017 de la OMS Europa), un índice que se ha duplicado en los últimos 20 años. Además, el impacto económico de estos problemas de salud, según un estudio realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en 52 países, es notable en el caso de España, con una reducción de la esperanza de vida de 2,6 años, un gasto sanitario equivalente al 9,7% y una disminución de la productividad laboral equivalente a 479.000 jornadas anuales, lo que en conjunto representa una reducción del 2,9% del PIB.