El Puerto de Barcelona participa en un proyecto para obtener combustible cero carbono a partir de residuos

Este combustible será destinado tanto al transporte marítimo de mercancías como al de personas, y se espera que sea completamente descarbonizado

El Puerto de Barcelona ha acogido la Asamblea General del proyecto «SUPORT», en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea. El objetivo de este proyecto, financiado con fondos NextGenerationEU, es obtener combustible de cero emisiones a partir de residuos orgánicos y barros de depuradora, utilizando el CO2 como combustible para el transporte marítimo.

Los socios del proyecto «SUPORT», que ha sido subvencionado como parte del Plan Estatal de Investigación Científica, Técnica y de Innovación 2021-2023 del Ministerio de Ciencia e Innovación, incluyen al Puerto de Barcelona, al centro de excelencia en investigación energética IREC, Aigües de Barcelona, el Centro Tecnológico del Agua (Cetaqua) y el Centro para la Innovación en el Transporte (CENIT) del International Center for Numerical Methods in Engineering (CIMNE).

Este proyecto, que comenzó en diciembre de 2022 y finalizará en diciembre de 2025, tiene como objetivo validar varias tecnologías alternativas para producir un combustible sintético a partir de residuos orgánicos y barros de depuradora. Este combustible será destinado tanto al transporte marítimo de mercancías como al de personas, y se espera que sea completamente descarbonizado. Los combustibles sintéticos son considerados como una de las opciones para lograr los objetivos de descarbonización del transporte terrestre y marítimo establecidos para 2050. Su combustión no genera emisiones de carbono y ofrecen una solución para segmentos de movilidad que no pueden electrificarse debido a restricciones de peso o a necesidades de autonomía de suministro elevadas.

El proyecto SOPORTE se divide en tres ramas principales. Cetaqua está trabajando en la obtención de hidrógeno de origen biológico a través de un proceso de fermentación oscura de residuos orgánicos provenientes de las depuradoras de Aguas de Barcelona, así como de residuos orgánicos recogidos de los mercados municipales y residuos Marpol de los barcos que operan en el Puerto de Barcelona. En esta línea de trabajo, el Puerto de Barcelona y Cetaqua realizarán un estudio para caracterizar cuantitativa y cualitativamente los residuos disponibles en el recinto portuario y en el Área Metropolitana de Barcelona, con el fin de evaluar el potencial de producción de este hidrógeno biológico.

Por otro lado, el grupo liderado por el IREC está desarrollando un proceso de co-electrólisis de alta temperatura tipo SOEC para obtener gas de síntesis a partir de dióxido de carbono (CO2) y agua regenerada de las depuradoras. La tercera rama del proyecto se centra en utilizar este gas de síntesis para generar gasóleo sintético marino mediante el proceso químico Fischer-Tropsch en un reactor catalítico.

En última instancia, el proyecto integrará estas tres ramas en un único prototipo que demostrará la viabilidad de una producción sostenible de combustible sintético.

Además, el Puerto de Barcelona llevará a cabo un estudio de demanda de combustibles alternativos en su recinto. Los resultados de este estudio serán utilizados para realizar un análisis ambiental y tecnoeconómico de la solución propuesta por el CIMNE-CENIT. El objetivo es evaluar no solo las ventajas ambientales derivadas del proyecto, sino también identificar los potenciales clientes de estos combustibles y analizar los costos de producción y distribución, para asegurar su atractivo económico para los posibles usuarios finales, como armadores y otros clientes.

La participación del Puerto de Barcelona en el proyecto «SUPORT» refleja su compromiso de descarbonizar su actividad y fomentar opciones para obtener nuevos combustibles verdes que puedan suministrarse a barcos y flotas de transporte por carretera. La producción de biocombustibles y combustibles sintéticos, como los que se obtendrán en este proyecto, permitirá reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en sectores difíciles de descarbonizar. Además, estos combustibles podrán utilizarse en los motores de combustión actuales, lo que generará un impacto inmediato y contribuirá rápidamente a los objetivos de descarbonización, según afirmó el presidente del Puerto de Barcelona, Lluís Salvadó.

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