La Capitanía Marítima de Tarragona, perteneciente a la Dirección General de la Marina Mercante del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, ha publicado su balance anual correspondiente al 2022. Según el informe presentado por el capitán José Manuel Robledano Esteban, se realizaron 704 inspecciones a buques de bandera española y extranjera con el fin de mejorar la seguridad marítima y evitar la contaminación.
Asimismo, se llevaron a cabo más de 200 operativos de emergencia en el mar que fueron atendidos por los servicios de Salvamento Marítimo. Además, se gestionaron 1.546 expedientes relacionados con la seguridad marítima y se abrieron 88 expedientes sancionadores, la mayoría de ellos relacionados con motos náuticas y embarcaciones de recreo.
Durante el año 2022, la Capitanía retuvo el yate Crescent en cumplimiento de las sanciones impuestas por la Unión Europea a Rusia. También se llevaron a cabo actividades de formación en seguridad marítima, con charlas ofrecidas a la Guardia Civil, Mossos d’Esquadra y Guardia Urbana de Tarragona, además de varios simulacros de emergencia para mejorar la eficacia en situaciones de crisis.
En cuanto a la gestión administrativa, se gestionaron 4.933 despachos, se tramitaron 1.887 titulaciones y se registraron 1.697 buques desde la Capitanía y sus Distritos Marítimos.
En resumen, la Capitanía Marítima de Tarragona ha realizado una intensa actividad durante el 2022 para garantizar la seguridad marítima, la prevención y lucha contra la contaminación en el mar, así como las condiciones generales de idoneidad, profesionalidad y titulación de las embarcaciones civiles, entre otras competencias.