A cierre del primer trimestre de 2023, hay 34.352 clientes de Endesa en Cádiz que cuentan con el bono social, lo que representa un aumento de 2.355 personas desde el 31 de diciembre de 2022 y de 9.385 personas desde finales de 2020. Del total de hogares beneficiados, 16.020 son familias vulnerables que tienen una reducción del 65% en su factura de consumo eléctrico y 18.332 son vulnerables severas que tienen una reducción del 80%.
El 71,63% de los beneficiarios son personas en situación de vulnerabilidad según criterio de renta
El 71,63% de los beneficiarios son personas en situación de vulnerabilidad según criterio de renta, el 21,69% son familias numerosas, el 4,20% son pensionistas, el 1,22 % son beneficiarios del ingreso mínimo vital y el 1,27% son hogares con bajos ingresos particularmente afectados por la crisis energética. El aumento de beneficiarios del bono social se ha visto impulsado por la crisis energética y la asesoría proactiva que ha brindado la compañía Endesa a organismos e instituciones desde que entró en vigor el Real Decreto Ley 6/2022.
El Gobierno ha dado un paso más en su compromiso con la justicia energética al crear una nueva categoría de bono social regulada por el Real Decreto Ley 18/2022. Se trata del bono social de justicia energética, que supone un descuento del 40% sobre el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) y estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2023. Este bono está destinado a aquellas personas con una renta igual o inferior a 2 veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) de 14 pagas y superior a 1,5 veces el IPREM de 14 pagas, y que tengan como vivienda habitual el hogar que quieren beneficiar.
En la ciudad de Cádiz, se estima que ya son cerca de 13.373 familias las que han renovado automáticamente su bono social en toda España. Esto se debe a que Endesa, la empresa encargada de la gestión del bono social, se encarga de verificar directamente con el Ministerio de Transición Ecológica si los hogares cumplen con los requisitos necesarios para seguir percibiendo el descuento en la factura eléctrica. De esta manera, se evita que las familias tengan que realizar trámites adicionales cada dos años para renovar el bono social.
Desde su implantación en abril del año pasado, esta medida ha contribuido al crecimiento del colectivo beneficiario del bono social, ya que se ha eliminado la necesidad de realizar una solicitud de renovación cada dos años. Aquellos que ya disfrutaban de la ayuda antes de la entrada en vigor de la normativa, tienen una prórroga automática de dos años tras finalizar el período de percepción, y dos meses antes del siguiente vencimiento, Endesa les avisa para que puedan presentar la solicitud y la nueva documentación acreditativa de acuerdo con los nuevos requisitos. A partir de entonces, las renovaciones también pasan a ser automáticas cada dos años, siempre que se cumplan las condiciones establecidas por el Gobierno.