El Puerto de Barcelona lleva más de una década trabajando en materia de paridad y trata de asegurar el equilibrio de oportunidades entre sus trabajadores y trabajadoras. El año pasado entró en vigor el quinto Plan de Igualdad de la organización, un documento que recoge veintitrés medidas diseñadas para tener impacto positivo en distintos ámbitos del funcionamiento de la entidad como la comunicación interna y externa, la selección de personal, la formación profesional o las condiciones laborales de los trabajadores y trabajadoras, entre otros. Todas las medidas se tendrán que haber implementado hasta 2026 y cuentan con una Comisión de Seguimiento que asegura su cumplimiento.
Este miércoles, 8 de marzo, se celebra mundialmente el Día de la Mujer y para la ocasión, seis trabajadoras del Port de Barcelona reflexionan en un vídeo sobre su día a día laboral en campos profesionales especialmente masculinizados como son la informática, las obras de infraestructura o la ingeniería naval. Todas ellas, conocedoras de las dificultades que las mujeres sufren para llegar a ocupar posiciones como sus actuales trabajos, a la vez que esperanzadas de que cada día sea un poco más fácil conseguirlo y hacerlo en mejores condiciones.
Estas profesionales del Puerto de Barcelona están de acuerdo en que son de las pocas mujeres en sus respectivos departamentos y sobre todo, que donde echan más de menos la presencia femenina es en los cargos de responsabilidad. «Para mí, lo más importante es que a las mujeres se nos ofrezcan oportunidades para llegar a puestos de dirección», explica Gemma Peñalver, jefe de Obra del Puerto de Barcelona.
Aún así, sí que han notado mejoras en este sentido en los últimos años. “Cuando entré en el departamento, el staff directivo estaba formado por hombres, pero, de forma muy natural, esto ha ido cambiando”, considera Míriam Alaminos, subdirectora general y responsable de Económico Financiero. «Es un proceso lento y poco a poco, las mujeres vamos ocupando espacios que antes no podíamos», coincide María Martínez, técnica de Supervisión y Control de Obras y Servicios. Pero, más allá de una mayor representación femenina en el organigrama, también han detectado otros avances, destacando especialmente las facilidades que pone el Puerto para la conciliación familiar.
Sin embargo, a estas profesionales les parece que la paridad todavía queda muy lejos, desgraciadamente. “Es una cuestión social”, dice Eva Hernández, inspectora de la Policía Portuaria, y añade que “en la sociedad, hay mujeres y hay hombres y por eso mismo, la policía portuaria debe ser un reflejo. Necesitamos más mujeres”.
Consideran que es clave crear referentes de mujeres en aquellas especialidades que todavía tienen muy poca presencia femenina. “Debemos crear modelos. Sólo así dejaremos de pensar si hay una, dos o tres mujeres. Será entonces, cuando todo se haya superado”, concluye Ana Arévalo, Energy Transition Manager del Puerto de Barcelona.