Los datos ofrecidos por las cuatro estaciones de medición de emisiones atmosféricas en el entorno de la dársena de La Cabezuela-Puerto Real del Puerto Bahía de Cádiz, demuestran que la carga y descarga de graneles no contamina el aire de la Bahía.
Esta es una de las conclusiones expuesta por la presidenta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, Teófila Martínez, que, junto al director, Agustín Romero, y al jefe del Departamento de Desarrollo Portuario, José Miguel Pérez, ha presentado las últimas inversiones realizadas en materia de sostenibilidad ambiental, entre las que destaca la puesta en servicio de cuatro estaciones de medición, que monitorizan las 24 horas del día el impacto de la actividad portuaria y del resto de actividades (tráfico, industria, etc.) sobre la atmósfera.
Los datos aportados por dichas estaciones arrojan índices positivos, suponen “una herramienta más de transparencia y compromiso con la sostenibilidad a disposición de la ciudadanía para que tengan información de primera mano sobre las emisiones y puedan sacar sus propias conclusiones”, según la presidenta.
Estas estaciones de medición, tres de ellas ubicadas en el entorno de la dársena de La Cabezuela-Puerto Real y una en Cádiz, homologas por la Junta de Andalucía y certificadas por la cátedra de Calidad Ambiental de la Universidad de Huelva, reflejan que, tanto el promedio del PM2,5 como del PM10, así como el resto de indicadores ICA, NO2 y O3, están en el rango más bajo de valores, que corresponde con una calidad del aire buena, según la clasificación europea. y presentan los mejores resultados de toda la Bahía.
En concreto, los datos registrados de PM10 en todas las estaciones situadas alrededor de Puerto Real en un año de estudio son similares al resto de estaciones de la Bahía, e incluso los datos de PM10 registrados en la Estación de La Cabezuela (Puerto Real) son algo inferiores a los registrados en la Estación de Rio San Pedro.
Además, durante el periodo del estado de alarma (14 de marzo-31 de mayo de 2020), que supuso una parada en la movilidad del país (tráfico rodado) pero con el mantenimiento de la actividad portuaria, al ser una actividad esencial, se registró un descenso significativo del PM10 (22-27%), según recoge el informe final.
En los cuatro últimos años se han invertido alrededor de 5 millones de euros en la puesta en marcha de medidas correctoras que sitúan al muelle de Puerto Real como el más eficiente desde el punto de vista medioambiental de la región y uno de los más eficientes del país. Además de las pantallas de protección, se han puesto en servicio cañones pulverizadores de agua, se ha pavimentado el entorno, hay barredoras con aspiración, lava ruedas, pantallas vegetales, tolvas ecológicas, manual de buenas prácticas y, según ha adelantado la presidenta, antes de final de año se va a producir una auditoría medioambiental interna dentro de la implantación del Sistema de Gestión Ambiental y en el primer trimestre de 2023 se hará una auditoría externa, siguiendo las directrices de la norma ISO 14.001:2015 internacional, demostrando el compromiso permanente de la APBC con la mejora del desempeño en materia medioambiental.
Todos los operadores, además, cumplen con la Ley Autonómica de la Calidad del Aire, bajo la que se les autoriza la actividad y se monitoriza.